El televisor sigue siendo el rey de los hogares

El estudio analiza el papel del televisor en la vida de los españoles y cuáles son los recuerdos más potentes asociados a este dispositivo. El primer dato que llama la atención es el alto consumo televisivo que sigue existiendo hoy en día, a pesar de la variedad de fuentes y plataformas de entretenimiento que tienen a su disposición los consumidores. Así, el 85 % de los españoles ve la televisión todos los días, con una media de 2,3 televisores en casa.

"El televisor forma parte de nuestra vida y nos ha acompañado en buenos y malos momentos. De hecho, un 63 % de los españoles se entristecería si desaparecieran los televisores de su casa", explica el vicepresidente de Consumer Electronics de Samsung España, Raúl Martín.

El 84 % suele ver la televisión en la plataforma tradicional, el 37% consume la televisión de pago, el 27% usa el ordenador para verla, el 14% consume contenidos en 'streaming', el 9% usa la tableta y el 6% suele hacerlo desde el móvil.

El estudio recoge, además, que el 32% de los españoles comenta los contenidos que están viendo por televisión a través del teléfono móvil, ya sea en sus redes sociales o en las 'apps' de mensajería. Este hábito se convierte en una situación recurrente para el 54% de los espectadores menores de 30 años.

La posesión del mando a distancia sigue siendo motivo de disputa familiar, ya que solo dos de cada diez españoles puede presumir de tener el control del mando todo el tiempo que ve la televisión, una cifra que baja aún más entre los que tienen hijos. Muchos españoles recuerdan también cuando sus padres los utilizaban de "mando" en su infancia y les tocaba levantarse para cambiar de canal (74,5 %).

RECUERDOS EN TORNO A LA TELEVISIÓN

Los programas de televisión que nunca se pierden los españoles son la final del Mundial (40%), la final de la Champions (38%), los Juegos Olímpicos (31%), el sorteo de la Lotería de Navidad (27%) y el festival eurovisivo (21%).

Sin embargo, nada se mantiene tan vivo como los recuerdos de la niñez: para nueve de cada diez españoles, uno de los mejores momentos del día en su infancia era ver su programa o serie favorita en la televisión. Con la serie Verano azul, por ejemplo, crecieron más de 20 millones de españoles, y un 31 % aún recuerda la muerte de Chanquete como uno de los momentos televisivos más inolvidables.

Entre los momentos televisados que más nos han emocionado, destacan la caída de las Torres Gemelas el 11S de 2001 (67 %), los atentados del 11M en Madrid (60 %) y el Mundial de fútbol en Sudáfrica, con victoria de la selección española, de 2010 (45 %).

DEL BLANCO Y NEGRO A LOS COLORES

Desde que Philo Farnsworth creó el primer televisor completamente electrónico y logró emitir la primera señal de televisión en 1927, la tecnología de imagen ha experimentado una profunda y revolucionaria transformación. Al mismo tiempo, el televisor se ha ido consolidando en los hogares como el principal dispositivo de entretenimiento e información, capaz como ningún otro de reunir a su alrededor a familia y amigos.

Los primeros televisores domésticos, primero en blanco y negro y luego en color, llegaron en la década de 1970 y veinte años después empezaron a desarrollarse los televisores planos. Uno de los grandes hitos en la historia de la televisión se produce a finales de los noventa, con la aparición de la televisión digital.

A este avance le seguirían otros, ya en la década de 2000, como la introducción de los semiconductores y paneles LCD, la llegada de los televisores inteligentes con tiendas de aplicaciones o el primer televisor FHD 3D del mundo, lanzado por Samsung en 2010, que llevó al ámbito doméstico la experiencia tridimensional, con equipos de cine en casa, reproductores Blu-Ray y gafas especiales para disfrutar de los nuevos contenidos.

Junto al desarrollo de tecnologías clave como la ultra alta definición (UHD), la apuesta por las pantallas curvas consiguió también que el efecto envolvente se colara en los hogares, acercando cada vez más la experiencia de ver televisión a lo que antes se vivía en una sala de cine.

Entre los últimos avances, cabe destacar el desarrollo de televisores UHD flexibles, en los que el usuario puede convertir la pantalla de curvada a plana según sus preferencias, la introducción de las extraordinarias tecnologías Quantum dot y HDR para reproducir con total exactitud los colores y, finalmente, el Internet de la Cosas, que ha situado al televisor como centro de mando de los nuevos hogares inteligentes.

"El televisor no solo nos entretiene con nuestras series y películas favoritas, sino que también es una ventana al mundo para permanecer informados y aprender todo tipo de materias. Afortunadamente, los avances tecnológicos nos permiten hoy disfrutar de una experiencia televisiva muy completa, inteligente y con la máxima calidad de imagen", añade Martín.