En 2011 le diagnosticaron un cáncer, perdió trabajo y no puede hacer frente a la hipoteca. Su contrato tiene una cláusula abusiva: el 20% en intereses de demora. Ahora podría beneficiarse de la sentencia europea. Quienes hayan sido desahuciados ya podrían reclamar compensación por perjuicio. La banca dice que la sentencia es razonable y constructiva.