La caída de la producción hidráulica en un 50% por la sequía dispara las emisiones de CO2 en un 36% en lo que va de año

De enero a agosto de 2016 se emitieron un total de 34.672.158 toneladas de CO2 asociadas a la generación, mientras que en los primeros ocho meses de este año, la emisiones alcanzan las 47.317.002 toneladas este año. Al mismo tiempo, la energía producida a partir de carbón durante este periodo ha aumentado un 57,9 por ciento respecto a 2016 y la de ciclo combinado (principalmente gas), un 43,1 por ciento.

La producción de energía hidráulica de enero a agosto de 2017 ha sido de 15.635 gigawatios por hora, un 50,8 por ciento menos que durante el mismo periodo del año anterior, según el boletín mensual de REE publicado esta semana y en el que, además, la empresa pública explica que las reservas hídricas se han situado a finales de este mes en el 32,1 por ciento, 20 puntos porcentuales por debajo del nivel de 2016.

TAMBIÉN SUBEN LOS PRECIOS

Por su parte, el portavoz de la Asociación de Grandes Presas y Embalses, José Polimont, ha señalado en declaraciones a Europa Press que la sequía "es, sin ninguna duda", la que provoca esta situación y que su "consecuencia directa es el aumento de los precios de la energía" porque la hidroeléctrica "es la más barata". "Quien se va a ver más afectado es el bolsillo de los consumidores", ha pronosticado.

La reserva hidráulica se encuentra al 40,3 por ciento de su capacidad total esta semana en la que ha perdido 499 hectómetros cúbicos, lo que representa el 0,9 por ciento, según datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, que señala que en la actualidad los embalses guardan 22.531 hectómetros cúbicos.

CAÍDA DE UN 11% DE LA ENERGÍA EÓLICA EN LO QUE VA DE AÑO

Junto a este descenso, se encuentra también la caída de la producción mediante energía eólica, que en lo que va de año, acumula 31.765 gigawatios por hora, un 11 por ciento menos que durante el mismo periodo del año anterior.

Con estas cifras, en los primeros ocho meses del año se han perdido miles de gigawatios de producción libres de emisiones de dióxido de carbono con respecto al año anterior, en un mix energético en el que la energía nuclear es la tecnología con mayor peso en la generación, con un acumulado de 37.929 gigawatios por hora, la misma cifra que el año anterior.

La caída en el peso de las hidroeléctricas y las eólicas ha sido compensada, en parte, con carbón y ciclo combinado. Así, entre enero y agosto de 2017 se han producido 27.020 gigawatios por hora con carbón, lo que supone un 57,9 por ciento más que el año anterior, mientras que durante este mismo periodo, el ciclo combinado ha sido el responsable de 19.321 gigawatios por hora, un 43,1 por ciento más que durante los primero ocho meses de 2016.