Las alternativas a las pajitas de plástico para evitar los peligros medioambientales

Es una plaga, apenas unos minutos de uso para un residuo que resiste cientos de años. Un peligro medioambiental, un arma para las especies marinas. Por eso, la carrera por eliminarlas está en curso aunque existan rebeldes haciendo campaña en las redes a favor de las pajitas. También se ofrecen otras alternativas como las pajitas de acero inoxidable o las pajitas biodegrables hechas, en una fábrica de México, con el hueso del aguacate.

En México no es el único logar donde han buscado otra solución, en España la empresa Sorbos ha inventado las pajitas comestibles. Las hay hasta de 8 sabores y están hechas con compuestos 100 por 100 naturales. Que mantienen la rigidez durante 25 minutos al sumergirlas. Sorbos tiene la patente de la primera pajita comestible y ya está en 10 países. Ha vendido más de 3 millones y medio de unidades que, además, pueden personalizarse a gusto del consumidor.