Cuatro ladrones logran desvalijar las tragaperras de un restaurante de Barcelona en dos minutos

El sonido de la alarma despierta a los vecinos. Son testigos de toda la secuencia. Tres ladrones logran acceder dentro del bar. Otro, se queda vigilando. Con la tapa de la alcantarilla, rompen el cristal, y una vez dentro, con la misma fórmula, consiguen coger la recaudación de una semana de las máquinas recreativas, unos 2.800 euros. Quedan tan destrozadas que es casi imposible saber qué bote se llevaron. Desgraciadamente, para el propietario, no es la primera vez que roban en este local.

Los vecinos se quejan de la inseguridad el barrio. Piden vigilancia para no volver a tener que ser ellos quienes defiendan su barrio de los ladrones.