Un intruso charlatán de madrugada

La Policía de Florida busca a un individuo que se ha colado varias veces en un complejo de apartamentos de Orlando en busca de una charla nocturna.

El desconocido eligió un complejo de apartamentos cerca de Semoran Boulevard y Curry Ford Road, al este de Orlando, Florida (EE UU) para actuar. Al parecer, no se llevó nada, no iba armado ni era violento, tan solo quería una charla nocturna.

"Simplemente entró, se tumbó en la cama conmigo y empezó a hablarme y a tener una conversación normal, como si nada", ha declarado una de las víctimas a WFTV, a condición de que no se revelara su identidad. "Tenía miedo de gritar por si sacaba un arma. No podía ver nada, estaba muy oscuro". El intruso llevaba ropa negra y por el momento no se ha revelado que dejara ninguna huella, lo que dificulta las labores de búsqueda y captura.

"Un psicópata"

La mujer asegura haberlo pasado mal. "Hay que detenerle antes de que esto vaya a más. Realmente necesita ser atrapado porque es un psicópata", añade. "Me hablaba como si fuera un amigo mío, en mitad de la noche. Eso no lo hace una persona normal".

"Se había echado colonia y llevaba ropa amplia, no es un indigente. Quizá tenga problemas mentales". Tras el susto inicial, le pidió que abandonara su apartamento y él se quejó pero terminó cediendo y se marchó.

El caso más preocupante es el de una joven embarazada, de 19 años, que asegura que se despertó a las cinco de la madrugada cuando el individuo tanteó en la cama para llamar su atención. Todas ellas se encuentran en perfecto estado.

Temor a una escalada de violencia

La Policía de Orlando se ha volcado en el caso para apartar al hombre de las calles, ya que no están seguros de qué será lo próximo que haga. Otra víctima asegura que las cosas están empeorando y que algunos rumores apuntan a que ha empezado a llevarse cosas de los inmuebles. "A partir de este punto las cosas solo pueden empeorar".

Por ello, los oficiales ya se han desplazado al lugar de los hechos y han empezado a repartir flyers con retratos robot y advertencias entre los vecinos, con la esperanza de que alguien consiga identificarle y aportar más pistas antes de que vuelva a colarse en algún otro domicilio.