El detenido por la muerte de la joven pareja hallada en el pantano de Susqueda ha defendido su inocencia a su llegada a casa de un familiar suyo del que se ocupaba en Anglés para realizar un nuevo registro. "Yo no he hecho nada", ha dicho entre sollozos. Por su parte, su hijo detenido también ha sido trasladado a la vivienda de la madre para un nuevo registro, al parecer relacionado con drogas.