El guardia civil de La Manada afirmó que no quería el pasaporte tras saltar la alerta

La clave del caso del pasaporte es la declaración de las funcionarias que lo atendieron en comisaría. Según la versión del abogado del guardia civil de La Manada, ellas le preguntaron a Guerrero"si él tenía intención de obtener el pasaporte. Llegó a decir que no, que no tenía intención de obtener el pasaporte”. Policía, Fiscalía y acusaciones lo desmienten. Aseguran que Guerrero rellenó el formulario con sus datos para obtener el duplicado, esperó su turno y lo pidió. Sólo cuando la funcionaria vio la alerta en pantalla dijo que no quería renovarlo. Es decir, después. Su novia pidió la cita previa para renovar el pasaporte antes de que Guerrero saliera de la cárcel, esa misma mañana. Y él llamó a la policía una hora después de salir de prisión para informarse.

Sorprende tanta gestión para algo que el resto de La Manada ha resuelto fácilmente. Ninguno ha entregado su pasaporte porque no lo encuentran. Simplemente han informado por escrito al Juzgado. Ahora la Audiencia de Pamplona debe valorar si Guerrero quería adelantarse y obtener el duplicado antes de que el juzgado informara a la policía.