Lo primero que inquieta a los investigadores es cómo un utilitario de más de 16 años fue capaz de llegar a la zona desde donde se precipitó el coche al agua. Una zona de difícil acceso sólo apta para coches 4x4. Todo apunta a que la persona que condujo hasta el agua, o era un conductor experimentado, o le daba igual destrozar el coche con tal de llegar.