El capitán Aliste cree que ETA pide perdón "con la boca pequeña" y que ya "no supone nada" porque el daño está hecho

Por ello, Aliste, que perdió las dos piernas cuando una bomba colocada en el bajo de su coche estalló en noviembre de 1995 en Salamanca, considera que el perdón que ETA ha pedido "era una condición que se les exigía" desde que "fueron derrotados" por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Asimismo, el capitan Aliste considera que ETA piden perdón "de una manera sui generis" ya que al referirse a personas "sin responsabilidad alguna" en el conflicto armado lo que hace es "salirse por la tangente" además de que ese perdón "ya no supone nada" porque el daño "ya está hecho".

"Que ellos pidan perdón ya no supone nada para las víctimas o sus familias porque el daño está hecho" ha precisado el capitán Aliste, quien considera que con este comunicado ETA escenifica algo que se le exigía "desde que fue derrotada".