Se reabre el debate para reducir la velocidad en carreteras secundarias

Los accidentes de tráfico en verano se suceden por las idas y venidas por el periodo vacacional de los trabajadores. El más reciente ha sido el que se cobró la vida de cuatro jóvenes en Vidreres (Girona). Un accidente que demuestra una vez más el peligro que siguen teniendo las carreteras comarcales, en las que hay muchos desplazamientos de madrugada.

En 2017 fallecieron en este tipo de vías 792 persona, 30 más que en 2016. Este dato ha reabierto el debate sobre si se debe reducir o no la velocidad en este tipo de vías. Una medida que ya ha puesto en marcha Francia hace pocos días, bajando 10 kilómetros por hora la velocidad permitida en carreteras de doble sentido sin separación. Este aspecto podría incluirse en la reforma de la Ley de Tráfico, que tendrá medidas como penas más altas por el uso del teléfono móvil.