Víctimas chilenas de abusos muestran en las redes sociales su satisfacción tras su reunión con el Papa: "Que sea útil"
EUROPA PRESS
30/04/201816:25 h."Muy contento y satisfecho. Terminada reunión con el Santo Padre, algo más de dos horas, sincera, acogedora y enormemente constructiva" comentó este sábado Hamilton, quien ejerce de médico, a través de su cuenta de Twitter.
El día anterior, Murillo se expresó de manera similar: "Hoy conversé 2 horas con el Papa. De manera muy respetuosa y franca le expresé la importancia de entender el abuso como un abuso de poder. De la necesidad de asumir la responsabilidad, el cuidado y no solo el perdón. También del postergado rol de la mujer y las comunidades", refirió.
"Solo espero que sea útil. Que ayude a cambiar lo que sea necesario para que el mundo sea un lugar que cuide, sane, acompañe y no que maltrate. Y que la Iglesia Católica en eso sea aliada y no más abusadora", agregó por el mismo medio.
Por su parte, Juan Carlos Cruz, que vive en Estados Unidos y ha sido el último en reunirse con el Papa, también ha mostrado su satisfacción al respecto. "Más de dos horas y media duró mi reunión con el Papa. Estoy muy conmovido. Me escuchó con gran respeto, cariño, cercanía, como un padre. Profundizamos en muchos temas. Hoy tengo más esperanza en el futuro de nuestra Iglesia. A pesar de que la tarea es enorme", relató.
Este lunes el Papa mantuvo otra reunión de forma conjunta con los tres. El Vaticano no hará declaraciones sobre los encuentros, pero está previsto que el próximo miércoles, Juan Carlos Cruz, James Hamilton y José Andrés Murillo, expliquen ante la prensa extranjera internacional su experiencia.
El encuentro precede a la reunión que tendrá el Papa con los obispos de Chile con el objetivo de dialogar sobre el informe que recoge varios testimonios que acusan al Obispo de Osorno, Monseñor Juan Barros, de haber encubierto los abusos sexuales cometidos por Karadima. El dossier sobre el caso fue entregado al Papa por monseñor Charles Scicluna quien viajó a Chile para entrevistarse con distintas partes de la Iglesia y con víctimas de Karadima.
Tras leerlo, el Pontífice pidió perdón y reconoció haber cometido "graves equivocaciones de valoración" en el caso que ha implicado al obispo de Osorno, que dirige la diócesis desde 2015 y siempre se ha declarado inocente, por encubrimiento en una carta en la que invitó a los obispos chilenos a Roma.
"En lo que me toca, reconozco y así quiero que lo transmitan fielmente, que he incurrido en graves equivocaciones de valoración y percepción de la situación, especialmente por falta de información veraz y equilibrada", afirmó.
Fernando Karadima fue declarado culpable por el Vaticano el 16 de enero de 2011 por haber cometido abusos sexuales contra menores y condenado a vivir una vida de retiro en oración y penitencia con la prohibición expresa de ejercer su ministerio.