El viaje de los Reyes a Reino Unido subrayará el deseo de España de mantener la mejor relación tras el Brexit

Los Reyes Felipe y Letizia viajarán la semana que viene a Reino Unido con el propósito de subrayar el deseo de España de mantener las mejores relaciones bilaterales con este país después del Brexit, destacar la aportación de los ciudadanos españoles que residen allí y dedicarles a estos un mensaje de tranquilidad y optimismo en un momento que es de incertidumbre, puesto que las negociaciones para la salida británica de la UE están recién empezadas.

Fuentes diplomáticas admiten que este viaje de Estado tiene una importancia simbólica muy grande. La visita tuvo que aplazarse en dos ocasiones --en marzo de 2016 por la incertidumbre política en España y en junio de este año por las elecciones británicas-- y finalmente se celebrará en un contexto muy distinto del que vivía Reino Unido cuando el viaje se planeó, un año después del referéndum en el que los británicos decidieron salir de la UE y con las negociaciones para ello recién iniciadas.

Es la primera visita de Estado de los Reyes de España a Reino Unido desde 1986 y, si entonces la prioridad era construir una nueva relación entre los dos países en el marco de la UE, ahora el desafío es mantenerlas en el mismo nivel fuera de ese paraguas protector, con voluntad de avanzar juntos.

Así, la cita estará jalonada de símbolos, como el hecho de que los Reyes se alojen en Buckingham Palace, residencia de la Reina; el discurso de Don Felipe ante el Parlamento británico y su almuerzo con la primera ministra, Theresa May, y el hecho de que Isabel II haya querido que toda la familia real británica esté presente en la cena de gala que les ofrecerá en su primer día de visita.

El hecho, señalan las fuentes, es que las relaciones bilaterales entre España y Reino Unido pasan por su mejor momento histórico. La cooperación institucional es muy intensa --especialmente en seguridad y defensa-- pero también lo es la relación económica y la interacción social.

ESPAÑA, PRIMER INVERSOR EN REINO UNIDO

El comercio bilateral superó en 2016 los 30.000 millones de euros (con 8.000 millones de superávit para España) y Reino Unido es el principal destino de las inversiones españolas, con un stock de 82.500 millones hasta 2015. Según estudios españoles, en Reino Unido al menos 140.000 empleos directos dependen de inversiones españolas.

Reino Unido es, por su parte, el principal emisor de turistas hacia España (17,8 millones en 2016, uno de cada cuatro) y entre los dos países vuelan 35 millones de pasajeros al año, siendo España el país más conectado por aire con Reino Unido (un 17 por ciento de los vuelos tienen como origen o destino España, frente al 9 por ciento de Estados Unidos).

A ello se suman los 130.000 españoles registrados en los consulados británicos y los 300.000 británicos registrados en España --las cifras reales de residentes, puesto que mucha gente no se registra, pueden ser del doble--. En universidades y centros de estudios británicos trabajan hasta 5.000 investigadores españoles y el español se enseña en un 70 por ciento de los centros de secundaria públicos y el 89 por ciento de los privados.

BALLET, FÚTBOL Y RESTAURANTES

La presencia sociocultural de España en Reino Unido cuenta además con algunos símbolos: la directora del English National Ballet es la española Tamara Rojo, chefs de prestigio --como Arzak o Eneko Atxa-- tienen allí restaurantes y la Premier League cuenta más de 30 jugadores y técnicos españoles.

La negociación del Brexit está en manos de la Comisión Europea y no formará parte de la agenda del Rey, pero incidirá en algunos aspectos de la visita, que incluye encuentros con empresarios y con la colectividad española. A los españoles, el Rey quiere transmitirles un mensaje de apoyo y tranquilidad en la actual incertidumbre.

Tampoco será parte de las conversaciones el contencioso de Gibraltar, un asunto en el que, según destacan las fuentes consultadas, España mantiene su posición de reivindicación, pero que se ha logrado encapsular para que no obstaculice las relaciones entre los dos países.

PROGRAMA PROVISIONAL

Según el programa provisional del viaje, la visita comenzará el 12 de julio con un encuentro con el Príncipe de Gales y su esposa, la Duquesa de Cornualles, que los acompañarán al recibimiento oficial por parte de la Reina Isabel y el Duque de Edimburgo.

En esa primera jornada, habrá un almuerzo privado de los Reyes con la monarca británica y el Duque de Edimburgo, con los que visitarán una exposición de objetos españoles de la colección real. Ese miércoles por la tarde tendrá lugar el discurso de Felipe VI ante una sesión conjunta del Parlamento británico y por la noche será la cena de gala en el Palacio de Buckingham.

El jueves la jornada comenzará con un encuentro empresarial hispano-británico y, posteriormente, los Reyes se desplazarán a la Abadía de Westminster para el homenaje a los caídos. Siempre según el programa provisional, el jueves el Rey almorzará con Theresa May en el 10 de Downing Street y por la noche ambos acudirán a una cena ofrecida por el alcalde de la City de Londres, Andrew Parmley.

El 14 de julio, los Reyes, tras ser despedidos oficialmente por la Reina Isabel II y el Duque de Edimburgo, y realizarán una visita al instituto Francis Crick, donde se reunirán con empleados y científicos españoles y habrá una audiencia a una representación de la Asociación de Científicos Españoles en el Reino Unido.

Después, está previsto que se desplacen a Oxford, donde su padre, Juan Carlos I, fue investido doctor Honoris Causa en el viaje de Estado de hace 31 años. Allí visitarán la Biblioteca Weston y participarán en un almuerzo en su honor. El último acto de la visita será una reunión con una representación de la comunidad académica en Exeter College, ente ellos profesores y estudiantes españoles.