El Papa critica la xenofobia contra los migrantes y pide "reflexión" para hallar nuevas formas de educar "la conciencia"

"Es importante asimismo reflexionar sobre las reacciones negativas de principio, a veces también discriminatorias y xenófobas, que la acogida de los migrantes está suscitando en Países de antigua tradición cristiana, para proponer itinerarios de formación de las conciencias", ha manifestado e pontífice.

Durante la reunión en el Vaticano con los miembros de esta asociación internacional que reúne a más de 200 ateneos e instituciones católicas de instrucción superior en varias partes del mundo, el Papa ha instado a poner en marcha ulteriores estudios sobre las causas remotas de las migraciones forzadas. Todo ello -según ha señalado- con el propósito de "encontrar soluciones practicables", aun a largo plazo, porque "primero hay que asegurar a las personas el derecho a no estar obligadas a emigrar".

En lo que respecta a la enseñanza, el Papa ha pedido a las universidades católicas que adopten programas que favorezcan "la instrucción de los refugiados" en varios niveles, tanto a través de cursos también a distancia, para aquellos que viven en los campos y centros de acogida, como a través de bolsas de estudio que permitan su reubicación.

Y ha agregado: "A nivel general, quisiera invitar a los ateneos católicos a educar a sus estudiantes, algunos de los cuales será líderes políticos, empresarios y artífices de cultura, a una lectura atenta del fenómeno migratorio, en una perspectiva de justicia, de corresponsabilidad global y de comunión en la diversidad cultural".

El obispo de Roma ha destacado de esta forma el lema que aúna a estas instituciones católica 'Saber para servir' al tiempo que ha enfatizado la importancia de la formación "enfocada hacia la responsabilidad social para la construcción de un mundo más justo y humano".En este sentido, ha señalado que "la realidad global y compleja de las migraciones contemporáneas" interpelan a una reflexión científica, teológica y pedagógica. Según ha explicado esta reflexión debe estar "bien arraigada en la doctrina social de la Iglesia" y debe tratar de "superar los prejuicios y los temores ligados a un escaso conocimiento del fenómeno migratorio".

Así ha recordado que las universidades católicas han promovido siempre la "armonización de la investigación científica con la teológica" impulsando el diálogo entre razón y fe.

De otro lado, ha instado a la profundización teológica sobre las migraciones como "signos de los tiempos" recordando que la Iglesia ha contemplado siempre en los migrantes la imagen de Cristo, que dijo: 'Era extranjero y me alojaron'.