Nace una empresa que asesorará a instituciones religiosas para invertir de acuerdo a la moral católica

El objetivo de esta iniciativa es, según explica su fundador, proporcionar soluciones de inversión a clientes que buscan una gestión profesional de su patrimonio e invertir "con coherencia a sus principios morales", en concreto los de la Doctrina Social de la Iglesia.

"Estamos convencidos de que a través de algo que puede parecer tan ajeno a la moral como es el acto concreto de invertir, también se puede dar testimonio cristiano", apunta Barragán, al tiempo que añade que "ya no hay que elegir entre rentabilidad e integridad".

Los principios de inversión de la empresa se dividen en cuatro pilares: el respeto a la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural, la promoción de la familia, la defensa de la dignidad humana y el cuidado de la Creación.

Además, Altum destinará el cien por cien del beneficio disponible a un único objetivo: apoyar la evangelización a través de "proyectos que fomenten la oración, la misión y la formación de vocaciones". También limitarán sus salarios a los sueldos de dominio público de funcionarios a nivel europeo que aparecen publicados en los boletines oficiales, según informa la empresa.

"Con este esquema conseguimos ser cien por cien transparentes con nuestros clientes y sobre todo enfocarnos en nuestra motivación principal: financiar proyectos que promuevan la evangelización", subraya Barragán.

Además de asesorar vehículos y carteras de inversión, desde Altum ayudarán a instituciones religiosas a elaborar informes de gestión y viabilidad económica de sus entidades e impartirán programas de formación en materia de gestión evangélica de los bienes.