José A. Marina: "El curso va a comenzar con una incertidumbre como no la he conocido nunca en mi larga vida de docente"

La entrada en vigor de la LOMCE, una norma cuyo calendario de implantación culmina en teoría en este curso con las de 'reválidas' de ESO y Bachillerato, está pendiente de los avatares políticos. La última posibilidad es que estas pruebas no lleguen a realizarse tras el acuerdo de investidura entre Ciudadanos y PP, que contempla paralalización de su aplicación.

Sin embargo, si Mariano Rajoy no obtiene suficientes apoyos en esta primera sesión de investidura, alumnos y profesores deberán seguir esperando para saber si finalmente se mantiene o no el calendario de aplicación de la LOMCE, ya que se abren diferentes escenarios en función de si Rajoy consiguiese los apoyos en una hipotética segunda investidura, se formara un gobierno alternativo o se celebraran terceras elecciones.

En una entrevista concedida a Europa Press, este experto ya había calificado de "torpeza descomunal" la aprobación por el Gobierno de Mariano Rajoy de estas 'reválidas' a principios de agosto, "en un consejo de ministros veraniego y en funciones".

En todo caso, para Marina, el sistema de 'reválidas' de la LOMCE es "precipitado e improvisado" y sostiene que la evaluación es un tema "importantísimo" que "debe hacerse sistemáticamente y con cabeza", que debe analizar al sistema educativo "en su conjunto: alumnos, profesores, centros y administraciones".

El también rector de la Universidad de Padres considera que además de PP y Ciudadanos, "todos los partidos deben ceder en sus enrocamientos ideológicos", que "muchas veces no tienen justificación".

"Pensar, por ejemplo, que pedir calidad es de derechas y pedir equidad es de izquierdas, y que puede haber calidad sin equidad o viceversa, es una simpleza", asevera el artífice del 'Libro Blanco de la profesión docente', encargado por el ministro Méndez de Vigo.

Sobre el pacto educativo, señala que existen "enfrentamientos crónicos" desde finales del siglo XIX que han impedido "siempre" la posibilidad de un acuerdo y advierte de que los debates entre calidad y equidad, función educativa del Estado y los derechos de los padres, escuela publica o concertada, laica o religiosa "son temas ideológicos envejecidos y muchas veces falsos".

"LA EDUCACIÓN NO INTERESA NI A POLÍTICOS NI A CIUDADANOS"

Pese a los acuerdos puntuales como el de PP y C's, Marina advierte de que "el problema más grave es que la educación no interesa ni a los políticos ni a los ciudadanos". Recuerda que en las encuestas del CIS "nunca aparece la educación entre las preocupaciones de los ciudadanos" y afirma que "los políticos piensan que a pesar de las protestas puntuales todo el mundo está satisfecho y que no vale la pena hacer nada".

Marina, que ha redactado los 'Papeles para un pacto educativo' con los mismos colaboradores que el 'Libro Blanco' lamenta que algunos partidos políticos de izquierdas, organizaciones de padres y sindicatos de la Plataforma Estatal por la Escuela Pública se hayan negado a participar en los debates organizados por él para sentar las bases para un acuerdo.

"Se nos ha negado hasta la legitimidad para hacer una propuesta. ¡Es el colmo! Tenemos una democracia tan corporativa, que al parecer solo pueden hacer propuestas los poderes constituidos: partidos, sindicatos, confederaciones de lo que sea", afirma.

Explica que esta actitud responde a una idea "patrimonialista" de la política y que estas organizaciones se sienten "inmediatamente atacadas". "Partidos, sindicatos y confederaciones actúan con un dogmatismo que imposibilita cualquier debate. No quieren un pacto, quieren su pacto", asevera.