Imputados los dueños de varios perros encontrados muertos en una piscina abandonada en Castellón

Los hechos se remontan al 3 de marzo de 2016 cuando una vecina que paseaba por la zona del grupo El Carmen escuchó los gemidos y lamentos de un perro dentro de una parcela abandonada. La mujer, al observar que los ruidos provenían del interior de una balsa, llamó a la Sala Municipal de Seguridad y Emergencias 092 para alertar a la Policía Local que dentro de una piscina abandonada se estaba ahogando un perro.

Una patrulla destinada al Grupo de Intervención de Proximidad, G.I.P., llegó al lugar indicado por la vecina a los pocos minutos y observó que efectivamente dentro de la balsa había un perro que se encontraba dentro del agua y que estaba a punto de ahogarse. La empresa de recogida de animales se personó rápidamente en el lugar de los hechos y logró sacar con vida al animal.

El operario de dicha empresa indicó a los agentes, por otro lado, que durante el rescate del perro había encontrado dentro de la balsa varios cadáveres de otros perros en avanzado estado de descomposición.

Los agentes avisaron entonces a un retén de los bomberos municipales, que drenaron la piscina y localizaron dentro de la balsa los restos de cuatro perros. Los policías solicitaron entonces la presencia de los agentes de la Unidad de Protección de la Naturaleza, UPROMA, quienes procedieron a iniciar la investigación sobre los propietarios de estos perros y el motivo del abandono dentro de la balsa.

Después de realizar numerosas gestiones y solicitar varios informes periciales a dos veterinarios, los agentes de la Unidad UPROMA consiguieron localizar a los dueños de los cuatro perros muertos y finalmente ha imputado a tres personas un presunto delito de abandono animal contemplado en el artículo 337 bis del Código Penal.

ACCIÓN HUMANA

En los informes periciales encargados, los veterinarios pudieron establecer por el estado de los cuerpos de los animales la fecha aproximada de la muerte y los motivos por lo que fallecieron, que no dudan en establecer como consecuencia de la acción humana, ya que el informe establece "sin ningún género de dudas" que los animales por sí solos no pudieron caer accidentalmente en la balsa y que la mano del hombre está detrás de la muerte de los cánidos.

Por otro lado, los agentes de la Unidad UPROMA, dadas las circunstancias del caso, han solicitado al juzgado igualmente que a las tres personas imputadas, de entre 21 y 47 años, se les inhabilite para la tenencia de animales.