Se cumplen 100 años del nacimiento de Francisco Bernis, fundador de SEO y quien convenció a Franco de preservar Doñana

Así, la ONG ha anunciado que con motivo de su centenario celebrará durante los próximos 12 meses distintas actividades en su recuerdo y para destacar su figura al considerar que es "un gran desconocido por la sociedad a pesar de sus enormes aportaciones al mundo de la cultura ecológica de España y de Europa".

Entre 1944 y 1950 se dedicó a la geobotánica y a investigar las aves. Cuando tenía 18 años comenzó a muestrear las localidades de Ávila y más tarde, desde la trinchera en la Guerra Civil española aprovechó el periscopio del tajo y el telémetro de una batería antiaérea para controlar la migración y presencia de vencejos y otras aves en vuelo.

Ejerció como profesor en Lugo durante unos años y después, en 1954 fundó, con 38 años de edad la Sociedad Española de Ornitología y publicó el Prontuario de la avifauna española, el primer tratado que recoge los nombres científicos y españoles de las aves de España y Portugal.

Durante aquella época, las publicaciones especializadas procedían del extranjero y las poblaciones de aves nativas sufrían grandes impactos por la caza abusiva y la persecución de las denominadas "alimañas", frecuentemente con estricnina, mediante la destrucción de los bosques o la desecación de lagunas y marismas.

Precisamente en ese marco, Francisco Bernis redactó una carta al jefe del Estado Francisco Franco en la que advertía de las consecuencias negativas que tendría plantar eucaliptos en Doñana y que concluía ya en 1953 que el eucalipto convierte la tierra en desierto.

A los 40 año, en 1956 obtuvo la cátedra de Zoología de Vertebrados de la Universidad Complutense de Madrid; fue vicedecano de la Facultad de Biología (1982-1984) y, tras su jubilación (1985), profesor emérito hasta su fallecimiento en noviembre de 2003 en Madrid.

Según recuerda la ONG, Bernis fomentó las relaciones internacionales y participó en grandes congresos de ornitología, como la Conferencia Ramsar de Zonas Húmedas de 1971 que dio lugar a convenios y tratados fundamentales para el conservacionismo mundial.

En su opinión, para estudiar las aves era necesario "todo un batallón de ornitólogos de campo", como en otros países de Europa y Norteamérica. Así, organizó un censo de patos en invierno, capturar y anillar aves migratorias, lo que bautizó como "ornitología de alpargata" que sentó las bases de lo que en la actualidad se conoce como ciencia ciudadana.

Bernis publicó posteriormente distintas obras sobre ornitología y siguió con su actividad investigadora y docente, al tiempo que ejerció como secretario general de SEO durante 20 años.

Para la directora ejecutiva de SEO/BirdLife, Asunción Ruiz, la sociedad tiene "una gran deuda pendiente" con la figura de Francisco Bernis por lo que uno de los compromisos de la ONG es "conseguir saldarla".

"Su trayectoria en el mundo de la ciencia y la conservación de nuestro país, y particularmente al frente de SEO/BirdLife, da testimonio de su empuje y determinación para combatir las necesidades que afrontaba la conservación de la naturaleza en tiempos tan difíciles. Ya fuera subido en un tejado anillando cigüeñas, recorriendo la meseta en una motocicleta, de expedición por unas todavía desconocidas marismas del Guadalquivir o en congresos mundiales, Bernis contribuyó decididamente a sentar las bases del movimiento ambiental y conservacionista internacional. En la organización que él creó nos esforzamos cada día por mantener vivo ese legado", ha concluido.

Finalmente, el naturalista y escritor Joaquín Araújo, uno de quienes más trató a Francisco Bernis, le atribuye que se lograra que las aves "dejaran de ser solo para la cazuela para ser también, y sobre todo, para la admiración responsable y respetuosa del primer y mejor fundado ecologismo".