La Ertzaintza registra la vivienda de los tres detenidos por el crimen de los dos octogenarios
El tercer detenido, de 16 años, no participó directamente en el ataque, pero los agentes le otorgan un papel fundamental en el crimen de Rafael y Lucia. Él eligió a las víctimas e hizo labores de vigilancia durante el asalto. Los agentes han registrado su vivienda y se han llevado varios cuchillos. La noche anterior, los otros dos detenidos de 14 años durmieron en su casa. Por la mañana, cuando pensaban que no había nadie en la vivienda se colaron por la ventana trepando por unas tuberías. Los investigadores creen que al verse sorprendidos por el matrimonio lo que iba a ser un robo se convirtió en un asesinato. Su falta de experiencia hizo además que dejaran el piso lleno de huellas dactilares, y que con las prisas abandonaran la mitad del botín.