Encuentra a su gato a 20 kilómetros de casa ocho años después de su desaparición

La propietaria de Malcolm se quedó atónita tras recibir una llamada del veterinario confirmando que habían encontrado a su gato a 20 kilómetros de casa después de su desaparición hace ocho años, tal y como publica DailyMail.

Susan MacDonald, de 49 años, estuvo muy afectada en 2007 con la desaparición de Malcolm en su casa de Rockbeare, cerca de Exeter, en Devon (Inglaterra).

Ese gato lo era todo para la Sra MacDonald, que buscó noche y día a su mascota atigrada por todo el pueblo. Empapeló las calles con la carita de su felino con la certeza que lo encontraría, pero todos los esfuerzos no obtuvieron resultado y finalmente perdió toda esperanza. La mujer abandonó la zona tras la desaparición.

Pero recientemente, Susan MacDonald volvió al pueblo y a los pocos meses recibió una llamada que nunca creyó que recibiría, Malcolm había aparecido.

El gato merodeaba por las calles de Cullompton, a sólo 20 kilómetros de casa. Un vagabundo lo encontró y lo llevó al veterinario Maureen Hutchinson, que escaneó el microchip que llevaba el animal en el cuello y se puso en contacto inmediatamente con la señora MacDonald.

La Sra MacDonald tuvo su reencuentro soñado el sábado. La mujer comentó que el gato estaba igual que cuando desapareció, pero un “poco más gordo”.

"Mi vida ha cambiado tanto desde que desapareció. Él era el gato de mi hija, pero ella ya ha crecido y ahora vive en Iowa (EEUU).

"No creo que haya llegado tan lejos por sí solo. Seguro que alguien lo recogió en coche, alguien lo adoptaría”

"No me lo podía creer. Nunca piensas que te vas a encontrar con tu animal ocho años después”, comenta aún sorprendida.

"Malcolm ya no me recuerda, por mucho que me duela. Ha estado ausente durante ocho años, que es como unos 64 años en la vida de un gato”.

La señora Hutchison, la veterinaria que se puso en contacto con MacDonald dijo: "Obviamente, él se ha estado valiendo muy bien por sí solo estos últimos ocho años, y sin duda ha estado bien alimentado”.

Los microchips para mascotas contienen un número de identificación único que está vinculado a una base de datos que contiene los detalles de la mascota, así como los datos de contacto del propietario.