Desarticulan una organización que robaba por alunizaje con 42 delitos en Toledo, Cuenca y otras provincias

Asimismo, se han practicado tres registros domiciliarios en la localidad de Seseña (Toledo) y en Madrid, interviniéndose 9 vehículos que habían sido sustraídos para cometer los delitos, una escopeta, dos armas cortas simuladas, numeroso material robado y utensilios para cometer los delitos, como lanzas térmicas.

La operación se inició en septiembre del pasado año, a raíz de varios robos cometidos en una misma empresa de una localidad toledana, donde los delincuentes sustrajeron material por un valor de casi los 100.000 euros. Asimismo, los agentes pudieron constatar que durante ese mismo mes se habían cometido robos en otras empresas en las que los delincuentes volvían a cometer el delito pasados unos días, ha informado la Delegación del Gobierno en nota de prensa.

Continuando con las investigaciones, los agentes pudieron constatar, a través de las inspecciones oculares realizadas en la empresa de Toledo, que la forma de proceder de los autores coincidía con otros cometidos en el sur de la provincia de Madrid.

Posteriormente, la Guardia Civil localizó a un grupo de personas de nacionalidad española, de edades comprendidas entre los 17 y los 28 años, asentadas en los barrios madrileños de Orcasitas, Usera, San Fermín y de la localidad de Seseña (Toledo), que podría estar dedicándose a cometer robos mediante el método del "alunizaje".

GRANDES VEHÍCULOS Y MATRICULAS

Igualmente, los agentes pudieron comprobar que este grupo de personas utilizaba para cometer los robos vehículos de gran cilindrada (preferiblemente todo terreno) que previamente habían sustraído mediante anuladores de inmovilización electrónico y llaves maestras. Asimismo, sustraían placas de matrícula de otros vehículos para intercambiarlas cuando el vehículo iba a ser utilizado para cometer más de un delito.

Una vez que la Guardia Civil identificó a todos los integrantes de la organización y ubicó los lugares donde podrían hallarse ellos y los objetos sustraídos se procedió a la detención de todos sus integrantes y al registro de los domicilios.

La organización realizaba la vigilancia de los lugares donde se iban a cometer los robos y estudiaban las medidas de seguridad que debían emplear con vehículos propios, prestados o de alquiler.

Posteriormente, para cometer los robos con fuerza en los establecimientos comerciales y naves industriales utilizaban principalmente el método del "alunizaje". Si el acceso disponía de sistema anti-alunizaje, la red utilizaba lanzas térmicas y radiales de gasolina para violentar o cortar cualquier tipo de metal.

Una vez dentro sustraían cualquier producto con valor económico, entre los que destacan cosméticos, perfumes, dinero, billetes de Lotería Nacional, material electrónico o cualquier otro producto al que pudieran dar salida.

Dependiendo el grado de dificultad prevista a la hora de cometer los delitos, participaban entre 4 y 10 miembros del grupo, llegando a cometer hasta 4 hechos delictivos en una sola noche.

En los registros practicados se han intervenido una lanza térmica, 3 sopletes, 4 bombonas de oxígeno más acetileno, 1 inhibidor de frecuencia, una radial de gasolina, un escopeta que había sido sustraída en el año 2014, cartuchería, dos armas simuladas, 2 centralitas para la apertura de vehículos, 2 ganzuas de llave maestra, 5 extractores de bombines, una gorra oficial de la Guardia Civil, una defensa personal, diverso material audiovisual, numerosas herramientas usadas para cometer los delitos, 7.000 euros, gran cantidad de perfumes y productos cosméticos, 16 décimos de Lotería Nacional procedentes de un robos, especialmente el cometido en una Administración de Lotería de Burjasot (Valencia), por valor de 500.000 euros, mandos de garaje, entre otros.

A los detenidos se les imputa la supuesta autoria de 24 delitos de robo con fuerza en las cosas, 9 delitos de robo o hurto de vehículo a motor, 4 delitos de hurto de placas de matrícula, 3 delitos de daños y un delito de tenencia ilícita de armas.

Los delitos han sido cometidos en las localidades de Borox, El Viso de San Juan, Carranque y Seseña (Toledo), en Tarancón (Cuenca), en Burjasot (Valencia) y en Navalcarnero, Leganés, Alcorcón, Humanes, Venturada, Pinto, Fuenlabrada, Valdemoro, Villaviciosa de Odón, Ajalvir, Madrid, Getafe y Moraleja de En medio (Madrid).

La operación ha sido desarrollada por la Unidad Orgánica de Policía Judicial y el Área de Investigación de la Guardia Civil de Illescas (Toledo).