Denuncian al hospital comarcal de Melilla por la muerte de una mujer de 35 años tras someterse a una cesárea. En la intervención, además, el bebé sufrió un corte en la cara con el bisturí. Tras esta operación, la mujer tuvo que regresar urgentemente al quirófano para extirparle el útero. No se recuperó y murió pocas horas después. El hospital, por su parte, ha abierto una investigación interna.