Carol, la cajera de supermercado que le quitó el miedo a un niño con autismo

Caleb es un niño de tres años de edad que padece autismo pero que se parece mucho a cualquier otro pequeño. Le gusta Spiderman, es muy inteligente y su madre lo describe como un "muchacho cariñoso”.

"Las cosas que damos por sentado todos los días son difíciles para él", dijo su madre Emma a metro.co.uk, medio al que concedió la entrevista.

De hecho, su madre relataba que cualquier cosa como un cambio en la rutina, un nuevo alimento o visitar un lugar nuevo pueden resultarle difíciles. Del mismo modo, Caleb tiene retraso en el habla, lo que le supone un plus negativo en la dificultad para comunicarse. “Luces brillantes, ruidos fuertes y el ambiente ocupado pueden causar una sobrecarga, dejando a Caleb estresado”, ha afirmado su madre en la entrevista.

'Estas cosas, obviamente, hacen que sea difícil para nosotros como padres, porque entonces se vuelve estresante para nosotros. "Sientes que estás siendo juzgado como padre por todos los que te rodean", ha apostillado su madre. Para Emma, son los pequeños actos de bondad y comprensión que facilitan las cosas. Así que cuando Emma llevó a Caleb a comprar a Lee Mill Tesco una noche, se sintió increíblemente emocionada por las acciones de Carol, una trabajadora de uno de los supermercados de la cadena.

Cuando Caleb llegó a la caja, el hecho de ver la cantidad de trabajo que había sobre la caja he hizo ponerse en marcha y fue entonces cuando Carol intervino para ayudar, pidiendo a Caleb que viniera detrás de la caja y la ayudara a escanear los objetos.

"La acción de Carol significó que alguien que es un extraño estaba aceptando a nuestro hijo", ha afirmado la madre y ha considerado que no hay nada mas importante para ellos que sus propios hijos.

La madre ha relatado que los trabajadores del supermercado “ayudaron” a Caleb al conseguir darle una experiencia positiva de compras con el objetivo de demostrarle que el autismo “no es tan malo”.

Emma compartió su experiencia en la página de Facebook de la cadena de supermercados Tesco, donde recibió cientos de comentarios alabando las acciones de Carol. Asimismo espera que al compartir su historia, esto sirva para alentar a otras personas a ser tan comprensivas con los niños con autismo que luchan por realizar las tareas cotidianas. "Ojalá la gente supiera que cualquier niño con necesidades adicionales es único y especial", dijo Emma.

"Pueden encontrar cosas difíciles y a veces no pueden hacer frente a ciertas situaciones, pero son dotados de muchas otras maneras, pueden ser extremadamente inteligentes y son un activo para cualquiera que los conozca”, ha señalado Emma.

Por último, Emma concluyó en la entrevista que no se debe permitir que “un término médico definir una persona” ya que a su juicio, “todos son mucho más que eso”.