Theo Francken, el belga que ha impulsado la oferta de asilo a Puigdemont

La televisión de su propio país parodia a Theo Francken como a un ultra a la caza y captura de sin-papeles y refugiados. Histriónico, gesticulante, el hombre que dejaba caer una oferta de asilo a Puigdemont no tiene los mismos miramientos con los que huyen del hambre y de la guerra. En las redes sociales, el secretario de estado de Asilo ha llegado a usar el verbo “limpiar” para referirse a ellos.

También es amigo íntimo del fundador de una milicia neonazi que tuvo que ser ilegalizada. Su partido, la Nueva Alianza Flamenca, es el más votado en Bélgica. Defienden la separación total entre flamencos y valones, y son uno de los grandes apoyos del independentismo catalán en Europa. De hecho, Francken asistió a la Diada de hace tres semanas y compartió una foto con la estelada detrás.

Su presencia en el gobierno explica la ambigüedad del Ejecutivo belga en algunos momentos. Si insisten en apoyar a Puigdemont y a sus exconsejeros, puede abrirse una grave crisis política en el país. Otra más en Europa; otra más que apuntar al ‘procés’.