La ofensiva sobre Siria intensifica la guerra de propaganda

Un día después del ataque, ambas partes cantan victoria. Estados Unidos y aliados exhiben músculo militar con nuevas imágenes como el lanzamiento de un misil desde un submarino estadounidense en el mediterráneo oriental. "Misión cumplida" dice Washington. Para probarlo difunde las fotos, vía satélite de los 3 objetivos atacados completamente destrozados.

Mientras tanto, Siria lo desmiente todo. Las instalaciones de Damasco están arrasadas, sí, pero en los edificios no se investigaba con armas químicas, dice su versión oficial, sino con medicamentos contra el cáncer. El Pentágono acusa a Rusia de intensificar su campaña de desinformación. "Los trolls rusos han incrementado su actividad en un 2.000 por ciento", dice la portavoz Dana White.

En un vídeo difundido por diferentes canales de propaganda de Moscú, supuestos médicos sirios que atendieron a las víctimas del ataque de Duma aseguran que no apreciaron síntomas de envenenamiento químico. Los afectados sufrían en su mayoría intoxicación por humo.