Diez miembros de una familia intoxicados por monóxido de carbono en un centro de refugiados de Alemania

Dos de los afectados sufrían una intoxicación grave y han tenido que ser hospitalizados, ha explicado un portavoz de la Policía citado por la agencia de noticias alemana DPA.

Uno de los miembros de la familia alertó en un primer momento a los servicios médicos por una subida de tensión. Cuando los sanitarios llegaron al lugar se activó la alarma por monóxido de carbono, han informado los bomberos de Stuttgart.

La madre de la familia, de 44 años, el padre, de 46, y sus ocho hijos fueron atendidos en el mismo lugar. La Policía no ha concretado si había más personas en el edificio.

Efectivos de rescate con equipo de respiración descubrió entonces el origen del gas en la planta baja, donde había tres braseros con carbón encendidos. Con ayuda de ventiladores se redujo el nivel de monóxido de carbono hasta cotas de seguridad.

El monóxido de carbono se genera cuando ha una combustión sin el oxígeno suficiente y puede provocar desmayos e incluso la muerte por asfixia. El pasado 5 de febrero cuatro miembros de una familia fallecieron asfixiados en Esslingen, no muy lejos de Stuttgart.