Grecia, en estado de emergencia ante una de las peores tragedias de los últimos años

El infierno subió a la tierra en la región griega del Ática y expandió su furia. Tres frentes distintos a unas decenas de kilómetros de Atenas. Los fuegos habían empezado despacio a media tarde, y en ese momento no se veía la urgencia de evacuar las pobladísimas zonas costeras junto a los montes de pinos, pero, enseguida, el viento rabioso iba a avivar el desastre.

Sólo los más afortunados tuvieron escapatoria porque la amenaza del peligro crepitaba y el fuego y el humo corrían a toda prisa. Atrapados, luchando por su vida, muchas rogaban por una salvación que en esos momentos parecía difícil...

Ahora despejan los atascos que anoche fueron la muerte para decenas de personas que intentaban escapar y que se encontraron en una inexorable trampa.

Todavía se busca a decenas de desaparecidos. El estado de emergencia que ha declarado el Gobierno griego se queda corto para definir lo sucedido en unas pocas horas.