El desacuerdo sobre los jóvenes indocumentados bloquea la ley de gasto en EEUU

A las puertas del Senado, los jóvenes indocumentados esperaban continuar con su sueño, pero sus esperanzas se desvanecieron anoche, cuando los republicanos se negaron a ceder a la exigencia demócrata de mantener su estatus legal. Y durante unas horas el acuerdo para evitar el cierre de la Administración parecía posible, porque Trump llamó a la Casa Blanca al líder de la minoría demócrata. "Hemos hecho algunos progresos", aseguraba Chuck Schumer tras el encuentro, en el que el senador accedió a más gasto militar y puso incluso el muro de México sobre la mesa. A cambio el presidente apoyó la protección para los indocumentados, un borrador de acuerdo que no consiguió luz verde de los republicanos. "No presionó a su partido para aceptarlo", acusa Schumer, mientras que para el vicepresidente Pence los demócratas han antepuesto la política a la defensa nacional. A partir de hoy el apagón de liquidez deja al Gobierno sin presupuesto para pagar a 800.000 funcionarios. En el último cierre, durante el mandato de Obama en 2013, se paralizaron museos, parques nacionales y los sitios turísticos más emblemáticos del país.