Las autoridades de Israel han desplegado un centenar de agentes de policía en la Ciudad Vieja de Jerusalén como parte del dispositivo preparado para garantizar la seguridad de la ceremonia del Fuego Sagrado que reunirá a miles de devotos en la Iglesia del Santo Sepulcro. Las medidas de seguridad se extienden también a los alrededores del templo, donde miles de peregrinos llegados de todo el mundo siguen de cerca el tradicional rito.