UNICEF recuerda a la UE que de sus decisiones depende "la vida o la muerte" de niños migrantes

La agencia de la ONU ha denunciado que al menos 1.354 inmigrantes y refugiados han muerto ahogados entre noviembre de 2016 y finales de enero de 2017, entre ellos unos 190 niños. De este total, 1.191 perdieron la vida en la travesía entre Libia e Italia.

"El creciente número de niños desaparecidos en el mar subraya el carácter extremadamente peligroso del viaje del norte de África a Italia, así como la urgente necesidad de que los gobiernos de ambas orillas del Mediterráneo refuercen las medidas para mantenerlos a salvo", ha sostenido el director ejecutivo adjunto de UNICEF, Justin Forsyth.

"Las decisiones que se tomen en la cumbre del viernes podrían representar literalmente la diferencia entre la vida y la muerte para miles de niños que transitan desde Libia o se quedan varados en ese país", ha añadido, reclamando la necesidad de "acciones urgentes ahora".

En este sentido, UNICEF ha pedido a la UE y sus estados miembro que se comprometan a adoptar medidas para prevenir la explotación y la trata de niños y cumplir plenamente el principio de "no devolución", ya que enviar a los niños de regreso al peligro o devolver los barcos a Libia sin un plan adecuado para protegerlos sólo aumentaría sus dificultades.

Asimismo, les ha reclamado que comprometan recursos para fortalecer los programas de protección de la infancia en Libia, invertir en centros de acogida y atención en Libia, que deben proporcionar servicios de educación y salud, y nunca deben utilizarse para detener a los niños en base a su estatus migratorio, e invertir en programas fiables de reasentamiento y reunificación familiar para que los refugiados y migrantes desesperados no tengan que recurrir a traficantes y arriesgar sus vidas.

UNICEF está trabajando en las rutas migratorias, incluido Libia, proporcionando a los niños refugiados y migrantes y a las familias servicios de protección infantil, agua y saneamiento, educación, salud e higiene.

El miércoles por la noche, UNICEF y su aliado Intersos participaron en el rescate de 754 personas en las aguas del Mediterráneo central, entre ellas 148 niños no acompañados. En los últimos días, el servicio de Guardacostas italiano ha rescatado a 285 niños con el apoyo de UNICEF e Intersos.

"El mar Mediterráneo debe dejar de ser el agua donde se hundan las esperanzas de los migrantes y refugiados. Es una situación intolerable", ha sostenido el director ejecutivo de UNICEF Comité Español, Javier Martos.

"Los gobiernos deben tomar acciones definitivas para romper este ciclo de muerte y evitar que continúe vulnerándose el Derecho Internacional Humanitario", ha añadido en un comunicado.