Siria asegura haber hallado en Ghuta Oriental un taller de armas químicas perteneciente a los rebeldes

El coronel del Ejército sirio Firas Ibrahim ha indicado que "al parecer" en las instalaciones "fabricaban los proyectiles en el marco del plan de provocaciones para acusar a las fuerzas gubernamentales del empleo de armas químicas".

Activistas y milicias han denunciado la utilización de bombas incendiarias en la ofensiva militar a pesar de que se trata de un área densamente poblada y denuncian también el posible uso de gas de cloro y síntomas de asfixia.

Sin embargo, Damasco ha negado utilizar este tipo de armamento y ha asegurado que los rebeldes están preparando un falso ataque químico para desacreditar al Ejército.

El Ejército sirio logró el domingo dividir en tres Ghuta Oriental, el principal reducto de los grupos armados rebeldes en la región de Damasco, según informó el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.

El Observatorio, una organización con sede en Londres pero con una amplia red de informantes en territorio sirio, señaló además que ya han muerto más de 1.100 civiles desde que comenzó la ofensiva gubernamental, hace tres semanas.

El sábado, la televisión pública siria emitió desde la localidad de Mesraba, recién capturada por el Ejército en una operación de cuña que divide el territorio insurgente y aísla las localidades de Duma y Harasta.

Sin embargo, los rebeldes han prometido seguir luchando a través de un comunicado del Ejército Libre Sirio publicado a última hora del sábado. En el texto, explicaron que han decidido no aceptar la oferta de rendición o retirada negociada del régimen.

Dos de las principales formaciones de Ghuta Oriental, Failaq al Rahman y Yaish al Islam también han anunciado que no se rendirán a pesar de que han perdido más de la mitad del enclave en las últimas dos semanas.