Duterte se muestra dispuesto a reanudar las conversaciones de paz con los rebeldes maoístas
EUROPA PRESS
03/04/201815:55 h."Me gustaría dirigirme al ENP", ha dicho en el discurso que ha pronunciado durante un acto oficial en Mindoro Oriental, bastión rebelde. Duterte ha abogado por encontrar "un punto intermedio" porque "no podemos luchar para siempre".
El mandatario asiático ha puesto como requisitos previos que los insurgentes renuncien a un gobierno de coalición y que dejen de atacar a las empresas multinacionales que trabajan en la construcción de infraestructuras y en la explotación de los recursos naturales, así como de recaudar impuestos.
Una vez satisfechas estas condiciones, podría declararse un alto el fuego bilateral para favorecer un eventual diálogo de paz, ha indicado, según informa la cadena filipina ABS-CBN.
A su llegada al Gobierno, en 2016, Duterte liberó a algunos líderes maoístas encarcelados e incluyó a dirigentes de izquierda en su Gabinete para forzar unas negociaciones de paz. Sin embargo, descarrilaron en noviembre por los continuos ataques del ENP.
Ya roto el proceso de paz, el jefe de Estado solicitó a través del Ministerio de Justicia a un tribunal local que declarara ilegal el Partido Comunista y a sus facciones armadas por considerar que es en realidad una organización terrorista.
Desde 1986, cuando Noruega impulsó el primer proceso de paz con las guerrillas maoístas de Filipinas, se han intentado varias negociaciones para acabar con un conflicto armado que ha dejado más de 40.000 muertos.