Detenido un telepredicador turco acusado de abusos de menores, secuestro y lavado de dinero

Acompañaba sus sermones religiosos con los sensuales contoneos de seguidoras ligeras de ropa. Bailarinas sugerentes ponían la nota picante al singular fervor islámico de este telepredicador turco. A Adnan Oktar le gusta llamarlas las "gatitas" Entre mujeres exhuberantes, el telepredicador despotricaba contra la teoría de la evolución de Darwin. Se montaba un canal de televisión propio y un emporio que defendía al Presidente turco y coqueteaba con diputados en lujosos eventos. Hace una década escapó de la justicia turca por el escándalo de unas presuntas orgías, pero parece que el crédito del que gozaba se ha acabado.