Almagro designa a tres expertos para evaluar si la situación en Venezuela debe ser remitida al TPI

Los elegidos son el costarricense Manuel Ventura Robles, el argentino Santiago Cantón y el canadiense Irwin Cotler. Los expertos revisarán el informe que redactará la Secretaría General de la OEA, en un proceso supervisado por el exfiscal jefe del TPI Luis Moreno Ocampo.

Almagro nombró en julio a Moreno Ocampo para que evaluara la presunta comisión de crímenes de lesa humanidad en el país sudamericano y determinar si la información recopilada debería ser enviada al TPI.

Ventura Robles fue juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos; Cantón es secretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires y fue secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos; y Cotler es presidente del Centro de Derechos Humanos Raul Wallenberg y exministro de Justicia y exfiscal General de Canadá.

El lunes, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Hussein, denunció que el Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, podría haber cometido crímenes contra la Humanidad por la represión de las fuerzas de seguridad contra los opositores.

En concreto, Al Hussein se ha referido a la investigación publicada por el organismo que preside sobre Venezuela. "Esta investigación sugiere la posibilidad de que ya se hayan cometido crímenes contra la Humanidad, que solo podrán ser confirmados por una investigación criminal posterior", aseguró.

En respuesta, el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza, denunció la "parcialización" y "subjetividad" del Alto Comisionado con "informes plagados de mentiras, datos incomprobables y argumentos tergiversados".

"Los recientes intentos de informes contra Venezuela carecen de rigor metodológico, son infundados, inducidos y direccionados para perturbar la soberanía, la paz y la estabilidad de nuestro pueblo", argumentó, por lo que "exige" a Al Hussein "que cese la agresión contra Venezuela a través de informes que no cuentan con el mandato de los estados miembro".

Venezuela atraviesa una grave crisis política y económica con recesión, elevada inflación, escasez de alimentos y medicinas y más de cuatro meses de protestas durante los que han muerto unas 120 personas.