¿Debemos conocer si nuestro vecino es un delincuente sexual?

La idea de los registros de delincuentes sexuales reincidentes es legalmente delicada. Quienes la defienden dicen que hay delitos (los de índole sexual fundamentalmente) en los que no hay reinserción posible y por tanto, es necesario censar públicamente a los condenados.

Quienes la cuestionan aseguran que la pena se paga cuando se cumple y que no puede haber un estigma permanente para quien un día delinquió.

Esta opción de registros de delincuentes sexuales sí existe en países como Estados Unidos o Reino Unido, pero genera dudas en el gabinete de Pedro Sánchez.

Nadie dijo a Laura que su vecino de enfrente, por el que se sentía amenazada era un criminal. Si hubiese vivido en Estados Unidos, Laura con una aplicación móvil lo sabría. Así, como vemos en su publicidad, una joven corre sabiendo los antecedentes de cada vecino. Los círculos rojos peligro, las caras verdes nada que temer.

En Estados Unidos muchos indecentes son públicos en Europa no. Por eso el que fuese delegado contra la violencia de género se muestra a favor de que algunos lo sean. Avisan a los vecindarios en los casos de alta reincidencia y pederastia para que también en los entornos adopten medidas de protección

El problema es que la divulgación de ese dato tiene un frágil respaldo jurídico pues la pena no acaba cuando cumple condena sino quedará marcado para siempre. Por otro lado, el seguimiento al ex preso que marca un artículo del código penal no sirve para Montoya puesto que le condenaron antes que este artículo se aprobase.