Los periodistas secuestrados permanecieron en cubículos cerrados en 6 lugares distintos

Pasadas las 10 de la mañana aterrizaba el avión Falcon 900 enviado por las fuerzas armadas españolas a Turquía para trasladar a los 3 periodistas españoles después de casi diez meses de secuestro. Al pie de la escalerilla aguardaban la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría y el director del CNI Félix Sanz. El primero en salir es el jefe de Emergecia Consular del Ministerio de Asuntos Exteriores. Justo detrás al fin vemos a Antonio Pampliega y detrás a Ángel Sastre. En tercer lugar al foto reportero José Manuel López. Los tres muestran relativamente buen aspecto físico. De inmediato la hermana de Pampliega acude corriendo a abrazarle. No puede contener la emoción. Mientras, de fondo, escuchamos a la madre de Sastre llamándole y le aclara que no está llorando. Es el feliz reencuentro de los tres periodistas con sus familias, el fin de casi 10 meses de angustia. Según ha explicado José Manuel López, el 90 por ciento del tiempo han permanecido en habitáculos cerrados al menos en seis casas distintas.Y sólo permanecieron juntos los tres en los primeros tres meses de cautiverio. Después Pampliega fue llevado a otro lugar y no volvieron a verle hasta el día de la liberación. Nada más aterrizar se han reunido con sus familias en una cafetería en Madrid.