El embajador en Nicaragua estuvo pendiente de las protestas y volvió a su puesto el domingo, según Exteriores

El embajador español en Nicaragua, Rafael Garranza, se encontraba de permiso cuando comenzaron las protestas en este país, pero se mantuvo "en contacto permanente" con la embajada y con el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación y, por orden de éste, regresó a su puesto el domingo.

Así lo han explicado a Europa Press fuentes de la Oficina de Información Diplomática (OID) después de que el sindicato CSIF haya denunciado la ausencia del embajador desde que el pasado 18 estallaran unas protestas que han causado la muerte a siete personas, según Cruz Roja --aunque medios locales hablan de más de 20--.

Según estas fuentes, Garranza disponía de un permiso autorizado por Exteriores desde antes de que comenzasen las protestas pero cuando estas se desataron recibió instrucciones de volver a Managua. El regreso se hizo efectivo el domingo pero, entre tanto, estuvo "en contacto permanente" con la embajada y mantuvo reuniones en el Ministerio para coordinar la posición española sobre la situación.

En todo caso, han destacado que la ausencia del embajador no hace que la embajada esté inactiva, sino que el encargado de negocios y la responsable de la sección consular han estado en todo momento evaluando la situación y respondiendo a las preocupaciones de la colonia española.

NO HAY CONSTANCIA DE ESPAÑOLES AFECTADOS

Las mismas fuentes han señalado que, hasta la fecha, no hay constancia de españoles afectados por la violencia en el país.

Por otro lado, Exteriores ha actualizado este fin de semana las recomendaciones de viaje para este país y desaconseja viajar "salvo por razones de extrema necesidad", debido a que "desde el pasado 19 de abril se registran fuertes disturbios en varios puntos del país".

De encontrarse ya en Nicaragua, Exteriores recomienda evitar los desplazamientos que no sean necesarios durante los días en los que se den concentraciones de personas y cortes de tráfico y como tomar las precauciones necesarias para evitar riesgos.