El TC permite a Forcadell personarse en el incidente por la ley de referéndum para que pueda defenderse

El Pleno del Tribunal Constitucional (TC) ha permitido a la presidenta del Parlamento de Cataluña, Carme Forcadell, personarse en el incidente de ejecución presentado por el Gobierno contra la resolución de esta Cámara que permitió la tramitación de la ley de referéndum de autodeterminación para el 1 de octubre. Lo hace para que pueda defender sus derechos a título particular.

Así lo señala la providencia con la que el tribunal de garantías, de forma unánime, ha dado el visto bueno a la tramitación de esta petición del Gobierno de Mariano Rajoy.

La resolución da además tres días al Ministerio Fiscal y al propio Parlamento catalán para que formulen las alegaciones que estimen convenientes frente a las peticiones de la Abogacía del Estado, que reclama la nulidad de las resoluciones parlamentarias que se adoptaron en la sesión de ayer.

Respecto de Forcadell, su personación debe limitarse, según detalla el TC, "a los solos efectos de que en este incidente pueda defender sus derechos e intereses legítimos a título particular, sin perjuicio de la personación del Parlamento de Cataluña a través de sus servicios jurídicos".

La posibilidad de que pueda defenderse responde a la petición expresa por parte del Gobierno de que se deduzca testimonio contra Forcadell y el resto de miembros de la Mesa que votaron a favor de permitir el debate y aprobación de la ley de referéndum, para exigirles responsabilidad penal.

Los magistrados, que han interrumpido el Pleno tras adoptar esta decisión, volverán a reunirse sobre las 19 horas de hoy para estudiar los recursos de inconstitucionalidad que ha anunciado el Gobierno tras la aprobación anoche de la ley y la convocatoria de la consulta, han informado a Europa Press fuentes del tribunal.

La admisión del incidente constituye el primer paso del tribunal de garantías para dar respuesta a las últimas decisiones con las que el Parlamento y el gobierno catalanes buscan hacer realidad la ruptura con España. Permitirá un debate que puede concluir con la declaración de nulidad de las citadas resoluciones y, por ende, de las normas que se hayan aprobado como consecuencia de ellas.