Rato defiende que las 'tarjetas black' eran un incentivo "perfectamente legal"

Rodrigo Rato lo ha querido dejar claro desde el comienzo de su declaración. Cuando llegó a la presidencia de Caja Madrid recibió "una tarjeta para uso personal, sin justificación y para uso remuneratorio". Es el misma explicación que defendió Blesa el pasado viernes, juzgado por las llamadas tarjetas 'black'. El expresidente de la entidad rescatada ha asegurado que es lo que se encontró cuando llegó a la caja, que no tocó los límites de las tarjetas y que nunca dudó de su legalidad, porque lo vio como una retribución, un incentivo que era perfectamente legal. Además, explicó que nadie, entre una decena de organismos interno y externos conocedores de las tarjetas le comunicó ningún problema. Por eso mantuvo las tarjetas opacas en la nueva Bankia hasta que desaparecieron en 2011.