El juez Moreno estudia la denuncia contra un cargo de Exteriores por omisión de socorro a un español en México

El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha pedido a la Fiscalía que informe sobre si debe admitirse a trámite una denuncia presentada contra el subdirector general de Protección y Asistencia Consular, Javier Pagalday, y varios responsables del Consulado Español en Ciudad de México a los que un ciudadano español acusa de un delito de omisión del deber de socorro a su hijo, que acudió a pedir ayuda a estas autoridades tras ser estafado y sufrir una brutal paliza por parte de sus socios en el país centroamericano.

En su denuncia, presentada en octubre de este año y a la que ha tenido acceso Europa Press, se narra cómo el hijo del denunciante, Fernando F.G., fue objeto de una estafa por parte de sus socios y víctima de un posterior intento de asesinato "por encargo" a plena luz del día por una pandilla de ocho jóvenes que le golpearon con barras de hierro y le causaron una fractura de cráneo que le ha dejado una enorme cicatriz, rotura de tabique nasal y contusiones de gravedad en el resto del cuerpo.

El joven se trasladó a través de la Cruz Roja Mexicana al Hospital Central de la ciudad, donde abrió diligencia del caso el médico judicial, si bien sus socios le retiraron poco después de este centro sin que la policía fuera informada y le ingresaron en la UCI de un centro privado, el Hospital Alemán de la misma ciudad. De allí se le obligó a salir cuando vieron que Fernando no tenía suficiente dinero para la atención específica que requería, según reza la denuncia de su padre.

Abandonado a su suerte, sin trabajo y sin medios económicos -su familia en España tampoco podía aportarle nada importante al ser sus padres jubilados con escasa pensión-, Fernando recurrió al Consulado Español en Mérida, desde donde se limitaron a informar de lo sucedido al Consulado en Ciudad de México.

Las autoridades consulares se inhibieron del tema diciendo que ellos "no estaban para pagar viajes de vuelta a españoles", según afirma el padre, que es quien interpuso la denuncia en una comisaría española que es la que ha terminado siendo remitida a la Audiencia Nacional. Los hechos no están siendo investigados en el país centroamericano.

LLAMADAS AMENAZANTES

Tanto Fernando como su mujer, mexicana de Veracruz, continuaban malviviendo como podían en México y recibiendo amenazas de un teléfono móvil determinado hasta que una persona que prefiere estar en el anonimato sufragó su regreso a España, donde reside con su padre.

El motivo de la denuncia la explica el padre de Fernando por el trato que su hijo recibió de las autoridades diplomáticas españolas, señalando que cuando acudió a reunirse personalmente con el subdirector Pagalday para trasmitirle las tristes circunstancias del caso éste "hizo caso omiso, diciendo que solo atendían solicitudes des comisarías mexicanas".