González Pons advierte del regreso a Europa de "los nacional-populistas que se han vestido de demócratas"

Así lo ha manifestado este miércoles en la Real Maestranza de Caballería de Valencia, donde ha impartido la conferencia 'La reconfiguración de Europa tras el Brexit'.

El 'popular' ha afirmado que la salida de Reino Unido de la UE es un "error de dimensiones históricas" del que todos los estados miembros son "un poco responsables". Europa "se enfrenta cada día a problemas de toda clase y condición", entre ellos ha citado la crisis de los emigrantes y refugiados, las secuelas de la crisis económica y social o la amenaza del terrorismo.

Ante estas cuestiones, "ni los estados miembros ni la UE hemos estado a la altura de lo que se esperaba. La sociedad demandaba una explicación y nosotros no supimos dársela". Esta "falta de respuesta tuvo dos graves consecuencias": la "desafección" de la sociedad con instituciones y partidos y el "regreso de los movimientos nacional-populistas, extremistas y radicales que habían estado en cuarentena democrática desde la Segunda Guerra Mundial".

En su opinión, el "nacional-populismo vuelve a ser la mayor amenaza para la paz, la libertad y la democracia de Europa", un movimiento cuyos miembros "se han vestido de demócratas y usan palabras que suenan a democracia", ha alertado.

Estos representantes políticos, entre otros logros, "han convencido a 17 millones y medio de británicos para que votasen por abandonar la UE", "han sentado a la extrema derecha en el parlamento alemán" y, en España, "han convencido a la mitad del pueblo catalán para votar en contra de la otra mitad, convirtiéndoles en enemigos", ha afirmado.

SIETE "GRANDES DESAFÍOS"

González Pons ha subrayado además que "antiguos aliados, como Reino Unido o Estados Unidos, se están distanciando de Europa". "Nuestros viejos rivales, como Rusia, están amenazando de nuevo. Soy consciente de que el escenario que he dibujado es cualquier cosa menos alentados, pero todavía hay espacio para el optimismo", ha remarcado.

Bajo este punto de vista, el portavoz 'popular' en Bruselas ha afirmado que Europa "puede y debe reaccionar", y ha enumerado siete "grandes desafíos" para los que hay que estar "preparados".

Ha llamado así a "dar respuesta política a los daños colaterales de la globalización"; "reformar la arquitectura de la zona euro"; "hacer realidad el pilar social de la UE"; "abordar la transformación digital del continente"; "reforzar la política exterior y se seguridad común"; "reforzar la democracia europea" y, por último, preparase para "las crisis que están por venir", provocadas por guerras comerciales, la demografía, la crisis climática o la energética.

"Hoy, como hace cien años, tenemos que enfrentar la amenaza del nacional-populismo, que todo lo destruye y todo lo envenena. Como hace cien años, hay políticos insensatos capaces de poner en riesgo la estabilidad y prosperidad en base a mentiras y falsas utopías. Como hace cien años, volvemos a oír hablar sobre la Europa de las fronteras, las segregaciones culturales y raciales y las divisiones lingüísticas", ha censurado.

"LA DEMOCRACIA YA NO ES INVENCIBLE"

Para el dirigente del PP, "la verdad y la mentira se confunden", "la historia es olvidada", la Unión Europea "ya no es irreversible" y la "democracia ya no es invencible".

Por ello, ha instado a "recordar que la prosperidad y bienestar dependen de la paz y la estabilidad de Europa". "Si Europa desaparece, la democracia y la libertad desaparecerán con ella. Los demócratas ya entrados en años tenemos el deber de proteger el proyecto europeo de aquellos que intentan destruirlo, el deber de legar a las generaciones futura una Europa mejor en un mundo mejor", ha concluido.