Garzón, que echa de menos una "derecha inteligente", critica que Díaz se sume al "bloque reaccionario" del PP y Cs

El coordinador federal de IU, Alberto Garzón, ha criticado este viernes que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, se sume al "bloque reaccionario" que, a su juicio, han formado el PP y Cs ante el desafío secesionista de Cataluña, al tiempo que ha dicho que echa de menos que exista "una derecha inteligente" en España porque la que hay ahora "incendia el conflicto" y busca aprovecharse de la situación para "reforzar el centralismo".

Garzón, que ha participado junto al coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, en 'Los Encuentros' de la SER dedicados a los '40 años del 4-D', ha considerado "tramposo y cobarde el discurso que, en su mediocridad, nada más que hace llamamientos a cumplir la ley, como si la política solo fuera interpretar lo escrito", todo tras las detenciones, registros y incautaciones de material para el 1-O ocurridas en Cataluña.

De esta manera, y tras defender que en este asunto no se puede tener una visión cortoplacista, Garzón ha acusado al PP, con Mariano Rajoy a la cabeza; al líder de Cs, Albert Rivera; y a Susana Díaz, de conformar "un bloque reaccionario" que no quiere hablar de política y que "son incapaces de entender que hay procesos sociales que desbordan el ámbito jurídico". "Es irresponsable seguir manteniendo esa posición", ha apostillado antes de defender que la cuestión catalana se resuelve con más política y más democracia.

Y así, ha acusado a la derecha de "incendiar el conflicto" pues, "en un escenario pretendidamente democrático, lo que hace Rajoy, sin el apoyo del Parlamento --ha criticado-- es echar más gasolina al fuego". Por contra, el líder de IU ha apostado por defender un modelo federal que "permita la unidad con diversidad" porque sino, "al cerrar las vías del federalismo y más autonomía, se empuja al independentismo".

Asimismo, el dirigente de izquierdas se ha referido a la actitud "desconcertante" del PSOE que si bien fue "valiente" en el Congreso al votar contra las actuaciones del Gobierno, "ha prohibido a Unidos Podemos celebrar un acto contra la represión en la Diputación de Zaragoza, de mayoría socialista", una decisión con la que, en su opinión, "el PSOE forma parte de la represión".

En cuanto a la jefa del Ejecutivo andaluz, Garzón ha censurado que esté "dispuesta a sumarte al artículo 155" y se sitúe como "la más centralista" pues estas posiciones suponen "un problema grave que afecta a los andaluces y a quienes creen en la descentralización".

Frente a ese "bloque reaccionario", Garzón ha situado al "bloque demócrata", con partidos como Compromís, PNV, Unidos Podemos, Bildu o Esquerra, que comparten que "los problemas políticos hay que resolverlos desde la política". En cuanto al PSOE, ha considerado que está "roto" ante esta situación, de ahí que su líder, Pedro Sánchez, no haya hecho ninguna aparición oficial.

Garzón ha advertido que el problema que se corre ahora es que la represión "se normalice" pues entiende que en el actual escenario, aunque "de forma precisa no puede llamarse estado excepción, la situación empieza a aproximarse mucho a esa noción". "Necesitamos una sociedad democrática que se organice para no aceptar esto", ha aseverado.

De otro lado, y sobre la posibilidad de que lo que ocurre en Cataluña y su desenlace pueda perjudicar a Andalucía, Garzón ha dicho que eso dependerá de "cómo lo tomemos los andaluces". Ha incidido en que el 4D supuso la recuperación de una trayectoria identitaria andaluza y que ahora, desde Andalucía, "hay que saber ver lo que es la demanda del pueblo catalán, con independencia de que estemos o no de acuerdo, porque hay una demanda que no puede ser ignorada".

Tras recalcar que IU no es independentista pero que no se puede ignorar que el 80 por ciento de los catalanes quieren votar, ha insistido en que hay que comprender esa demanda "y solidarizarnos con ello" porque esto, ha agregado, "tiene mucho que ver con la historia de Andalucía".

A su juicio, "si lo vemos así, seremos capaces de abrir una vía que conduzca a la síntesis de un modelo federal en sus distintas posibilidades" pero en cambio ha advertido de que "si nos limitamos a ver la versión prepolítica del problema, estamos encaminados a un conflicto que es difícil saber por dónde va a salir".

"UNA ESTRATEGIA PARA REFORZAR EL CENTRALISMO"

Con todo, entiende que hay una estrategia del PP y de Cs "para aprovechar el nacionalismo catalán y los deseos independentistas para reforzar el centralismo", lo que se puede vacunar con la movilización, "especialmente de Andalucía, que puede neutralizar esta situación". Esto sería con una movilización de los andaluces que demuestre que comprenden la inquietud de los catalanes, reivindiquen la suya propia y apueste por ir a un estado federal.

"Esto podría salvar que en Cataluña no haya una mayoría independentista", ha sostenido antes de avisar de que "cuando los independentistas sean un 60 por ciento de la población ya no habrá nadie que salve esto, solo les quedará la fuerza más bestia".

No obstante, Garzón ha cree que el principal obstáculo para que esto ocurra es Susana Díaz, quien "prefiere unirse al bloque reaccionario, no se si por convicción o porque Pedro Sánchez está hipotéticamente en el otro", ha zanjado.

MAÍLLO: SUSANA DÍAZ, "HOOLIGAN CENTRALISTA"

De su lado, el coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, ha criticado que Susana Díaz, junto a Rajoy y a Rivera, se ha convertido en una "hoolingan del centralismo". "El 28F no lo pueden reivindicar quienes están por la centralización", ha agregado en alusión a la presidenta, todo antes de llamar a la movilización del pueblo andaluz el próximo 4D para "rearmar" a la sociedad andaluza y exigir autogobierno y soberanía y defender la igualdad de los territorios.

Maíllo ha defendido que Andalucía tiene la responsabilidad histórica de contribuir a crear un espacio de encuentro entre los pueblos de España y apostar por un modelo federal en el que encajen todos "desde la comodidad y no desde la humillación", frente al PP, que "aprovecha el debate territorial para hacer un rearme centralista".

Entiende que lo que ocurre en Cataluña es una oportunidad para que se abra paso desde Andalucía un nuevo pacto federal, cuando ha advertido que esta situación puede tener dos salidas, "la de los que echan más leña al fuego ante un problema político que no se pude tratar como si fuera un proceso administrativo, o la de quienes apostamos por abrazar desde Andalucía el modelo federal como solución".

Cree necesario abordar debate territorial "desde la audacia política" y rechazando "dinámicas represoras que no es más que la construcción de una hoja de ruta de la derecha reaccionara", mientras ha lamentado que Susana Díaz "no juegue ese papel para abrir paso a la sensatez desde el sur". "Andalucía puede ser parte de la solución en la vertebración de España", ha insistido Maíllo.

Así, ha criticado que Susana Díaz se sitúe en un discurso "legalista" y que "se niegue a utilizar la autonomía andaluza para construir puentes entre Cataluña y el Gobierno central", de manera que con esta posición, a su entender, "se convierte en una hooligan del centralismo".

En cuanto al hecho de que Cs vaya a defender en el Parlamento andaluz la misma iniciativa que se rechazó en el Congreso para avalar las actuaciones del Gobierno central en este conflicto, Maíllo cree que "sería triste aprobarla desde Andalucía" y ha reclamado al PSOE-A hacer un debate sincero y social para "no contribuir a echar más leña al fuego". "Si el PSOE-A se instaura en el bloque centralista reaccionario, contribuye a un desempoderamiento de la autonomía y soberanía andaluza", ha advertido el líder andaluz de IU.