La juez lo considera responsable de un delito de obstrucción a la justicia y otro de lesiones y le impone una multa de 7.300 euros. La víctima es el testigo protegido número 29 de la macrocausa policial, un ex empleado de Tito's que había informado sobre el tráfico de drogas y las fiestas para policías en la discoteca.