La acusación popular, satisfecha porque los "tratos de favor" en Kutxabank no queden "impunes"

Fernández y Alcorta han sido condenados cada uno a medio año de prisión y al pago de 4.500 euros de multa por un delito de apropiación indebida, mientras que al exdelegado del Gobierno en el País Vasco, Mikel Cabieces, se le ha impuesto un año de cárcel y el pago de 9.000 euros por cooperación necesaria en la comisión del hecho delictivo.

En un comunicado, la acusación popular muestra su satisfacción porque "finalmente, las personas que cometieron el delito de apropiación indebida, han sido condenadas".

La abogada Jone Goirizelaia pidió, durante el juicio, tres años y medio de cárcel para el exdelegado del Gobierno y el abogado, y dos años y tres meses de prisión para el expresidente de la entidad financiera.

Pese a no habérseles impuestos estas penas, la acusación popular ha destacado que su objetivo "era que los tratos de favor que en el contexto de la privatización de las cajas Vascas Kutxabank se cometieron, no quedaran impunes y que quienes, sin ningún tipo de contrapartidas laborales, como es el caso de Cabieces, recibieron sueldos millonarios fraudulentos, fueran condenados penalmente".

Además, asegura que éste es un primer pronunciamiento respecto a la resolución judicial, y afirma que evaluará "más detenidamente" otros aspectos de la sentencia "en los próximos días".