El Pacto de Toledo vuelve a reunirse mañana para definir qué es para cada grupo el poder adquisitivo

Así lo acordaron los grupos en la reunión celebrada el pasado miércoles en la fijaron cuatro puntos a analizar: la sostenibilidad del sistema, el mantenimiento del poder adquisitivo y la suficiencia, la posible pérdida de confianza de la ciudadanía en el Pacto de Toledo y la brecha de género.

Estos puntos fueron planteados por Unidos Podemos, cuya portavoz, la diputada de En Comú Aina Vidal, criticó que el propio Pacto de Toledo "no tiene sentido si no refleja las preguntas que se están haciendo miles de pensionistas".

Recordando que ya se han votado en Pleno y comisión decenas de mociones al respecto, Vidal plantea incluso que, si la cuestión del poder adquisitivo sigue separando a los grupos sin llegar a ningún tipo de avance, se proceda a votar la revisión de las recomendaciones.

Tras la reunión, formaciones como PSOE y Compromís señalaron que los grupos deberían ahora poner en claro qué es para cada uno el poder adquisitivo, y cómo articularlo en la necesaria reforma del sistema de pensiones, recordando que ellos mismos fijan la variación de los precios como referencia más válida para impedir el empobrecimiento de los pensionistas.

PP INSISTE EN SABER EL COSTE DE CADA PROPUESTA

Sin embargo, desde el PP sostienen que las propias recomendaciones del Pacto de Toledo incluyen otros elementos, como la productividad o la coyuntura económica para revalorizar las pensiones y que el actual índice, en circunstancias más favorables, permitiría subidas por encima de la inflación.

Además, desde hace unas semanas, vienen reclamando un impacto económico en todas las medidas propuestas por la oposición, pues creen que una vuelta a la inflación y la derogación de medidas como el factor de sostenibilidad, que entrará en vigor en enero de 2019, someterán al sistema a un considerable aumento de los gastos.

Pese a no alinearse con ninguna propuesta, ni el PP ni Ciudadanos han propuesto fórmulas concretas diferentes a las planteadas. Los 'populares' a la espera de conocer el coste de esas propuestas y defendiendo la validez de las reformas de 2011 y 2013, y la formación naranja condicionando cualquier cambio a reformas en el mercado de trabajo e incentivos a la natalidad.

Por su parte, tanto PDeCAT como PNV, que han respaldado en los debates parlamentarios recuperar la inflación como referencia para subir las pensiones, plantean soluciones intermediarias que contemplen, además del IPC, otros factores como la productividad o los salarios.