PSOE y Unidos Podemos pactan pedir al Gobierno que fusione Bankia y BMN y las mantenga en manos públicas

El objetivo último del texto transaccionado, que recoge Europa Press, es que ambas entidades nacionalizadas, que actualmente gestiona el Estado a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), se mantengan en el ámbito público mientras "aporten valor a los accionistas" y contribuyan así a recuperar los fondos del rescate financiero.

En cualquier caso, no se debería proceder a la desinversión parcial o total, o al ente que resultara de su fusión, mientras esa venta no suponga recuperar la totalidad de fondos públicos destinados al rescate bancario, y que según el Tribunal de Cuentas supera los 60.000 millones de euros.

Asimismo, cualquier privatización de estas entidades financieras debería ir precedida de una comparecencia urgente del ministro de Economía ante la comisión parlamentaria del ramo. Por último, la propuesta incluye aumentar "sustancialmente" los recursos económicos y humanos del Instituto de Crédito Oficial (ICO) y analizar los fallos del mercado bancario y habilitar líneas de financiación especiales para evitar la exclusión financiera de cualquier ciudadano o colectivo.

CAPITALISMO DE CASINO

El portavoz de En Comù, Xavier Domènech, ha culpado a las desregulaciones de los años 80 y 90 de la crisis financiera que llevó a España a la mayor crisis económica de las últimas décadas. "Esa sinrazón, esa irresponsabilidad, nos llevó a un capitalismo de casino", ha lamentado, apuntando que como consecuencia de esta situación se acabaron privatizando los beneficios mientras se socializaban las pérdidas del sector financiero y se llevaba a la "ruina" a la sociedad.

Por eso, Unidos Podemos propone "afrontar" la solución a esta situación manteniendo Bankia y Banca Mare Nostrum en manos públicas para, junto con el Instituto de Crédito Oficial (ICO), crear un "polo de banca pública" con el que poder aplicar políticas anticíclicas, como se ha hecho en países como Alemania, y fomentar un nuevo modelo de país. "Intentemos hacer políticas nuevas para tiempos nuevos, para superar realmente esta crisis", ha zanjado Domènech.

El socialista Javier Lasarte ha argumentado que se debe "aprender de los errores del pasado" y no repetir políticas fracasadas, como dejar todo en manos de un mercado que, "sin control, se convierte en una selva". Por eso, ha defendido el carácter mixto del sistema económico y financiero con controles adecuados, así como nuevas estructuras extrabancarias y entidades más sociales y éticas que amplíen la oferta financiera.

Jordi Salvador, de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), cree que la necesidad de conformar una banca pública es el resultado de "la codicia y la usura del sistema financiero", y ha criticado que preocupe más que Cataluña ejerza su soberanía que el hecho de que el Gobierno pueda perder la suya ante los bancos. Tanto EH Bildu como Compromís han anunciado su voto a favor de la propuesta.

TROPEZAR DOS VECES EN LA MISMA PIEDRA

Por contra, el 'popular' Juan Bravo ha coincidido en el objetivo recogido en la iniciativa de apoyar proyectos dentro de una política industrial a largo plazo, con especial atención a las pymes, pero ha discrepado de cómo lograrlo, recordando que en España "ya existe una banca pública" que es el ICO.

"¿Por qué no aprendemos de los errores e intentamos evitar que se vuelvan a repetir?", ha añadido, defendiendo el éxito de la reforma financiera de la pasada legislatura, que ha permitido incrementar el crédito y limitar el sobreendeudamiento.

El diputado Rodrigo Gómez, de Ciudadanos, se ha preguntado por qué Unidos Podemos quiere hacer que España "vuelva a tropezar en una piedra que ha salido carísimo a todos los españoles" como han sido las cajas de ahorros. Además, ha defendido que el ICO ya funciona "razonablemente bien" para cumplir con los cometidos que pide la iniciativa parlamentaria.

Por el PNV, Idoia Sagastizabal ha señalado que "la experiencia, lamentablemente, se caracteriza por entidades públicas politizadas y muy mal gestionadas", y ha calificado de "arriesgado" apostar por un polo público sin haber realizado antes un "análisis exhaustivo" sobre su capacidad presupuestaria, la forma de gestión o las posibilidades legales, entre otros aspectos.

Jordi Xuclá, del Partido Demócrata Europeo Catalán (PDeCAT) --la antigua Convergència-- ha afirmado que los "grandes errores" en la crisis bancaria han sido del Gobierno y del Banco de España, y ha defendido que el servicio financiero "se puede prestar desde lo público o lo privado" porque "lo que debe es ponerse el acento en la calidad de la supervisión".