El Tribunal de Cuentas pide a Patrimonio Nacional que solucione sus problemas de gestión con un Plan de actuación

El presidente del Tribunal de Cuentas, Ramón Álvarez de Miranda, ha pedido a Patrimonio Nacional un plan de actuación para resolver los problemas de gestión que se detectaron en el informe de fiscalización correspondiente al ejercicio 2013, en el que se habla directamente de "descontrol", y que, según ha apuntado, plantea "situaciones individualmente particulares no existentes en el resto de la Administración Pública".

Durante su intervención, este lunes, en la Comisión Mixta (Congreso-Senado) de relaciones con el Tribunal de Cuentas, el presidente de este organismo a señalado que el conjunto de gestiones que lleva a cabo Patrimonio Nacional son "muy mejorables", visto los problemas que, en esta materia, se han recogido en el documento y que abarcan carencias relativas a los medios personales y materiales, así como a los procedimientos y la contabilidad.

En concreto, el informe alerta de que Patrimonio Nacional no puede confirmar de manera rigurosa los ingresos por arrendamientos de los bienes que posee, muchos de los cuales, además, mantienen precios muy alejados, según alerta el documento, de los que marca el mercado.

Como ejemplo, la institución señala que en El Escorial, hay alquileres por un máximo de 96,05 euros al mes o en El Pardo, por 88,34 euros. Además, en el Real Patronato del Hospital del Rey (Burgos), la renta más baja es de 2,7 euros mensuales.

Del mismo modo, alerta de que Patrimonio Nacional es propietario de viviendas, locales, garajes, parques, montes, iglesias, colegios, estaciones de servicio, instalaciones deportivas, viveros y hoteles que, a su juicio, nada tienen que ver con los fines últimos que la ley otorga este órgano.

DESCONTROL EN LAS OBRAS

Esta falta de control sobre sus bienes se puede comprobar, según ha denunciado el presidente del Tribunal de Cuentas, en las diferencias existentes entre el número de inmuebles descritos como propiedad de Patrimonio y los que realmente existen.

Lo mismo ocurre con las obras. Así, el informe expone que el cuadro "La Anunciación" de Fra Angélico, que es del Museo del Prado desde 1996, figuraba en los registros de Patrimonio Nacional hasta 2013, una situación que, a juicio del Tribunal de Cuentas, no tiene explicación. Del mismo modo, expone que, en el inventario siguen apareciendo cinco cuadros que fueron sustraídos en 1988 (un Velázquez y un Juan Carreño, entre ellos).

El documento considera que esta situación demuestra el "descontrol" existente en este órgano y llama a los responsables a poner solución a estos errores, empezando por obtener lectores de códigos de barras, con los que no cuenta Patrimonio a pesar de que los bienes están catalogados de esta manera. Las claves se están introduciendo de manera manual, un nuevo foco de riesgo de errores, denuncia el Tribunal. Del mismo modo, apunta que en los traslados de bienes, y en algunas ocasiones, las copias documentales son modificadas a bolígrafo.

PERSONAL DESPROPORCIONADO, DESCONTROL DEL INVENTARIO

El órgano que preside Ramón Álvarez de Miranda también alerta de los errores cometidos en cuanto a contratación. En concreto, señala una mala repartición del personal que, a su juicio, obliga a improvisar decisiones cuando un departamento se ve desbordado de trabajo. Esto les lleva a "asumir un exceso de riesgos de errores", apunta el documento. "Se contratan además servicios externos de asesoramiento o gestión ordinaria sin justificación suficiente sobre su necesidad", alerta.

El informe de fiscalización también insiste en que tres miembros del Consejo de Administración de Patrimonio Nacional (CAPN) cobraron de manera incorrecta unas dietas, ya que no asistieron a las reuniones que les hubiera dado derecho a obtenerlas.

Por otra parte, el Tribunal de Cuentas advierte de la relación que existe entre Patrimonio Nacional y los reales patronatos. El informe afirma que no se conoce exactamente el valor de las prestaciones que el primero ofrece al segundo, entre otras razones por el confusionismo que rodea a los reales patronatos.

NO SE PONE EN RIESGO LOS REALES PATRONATOS

Entre las recomendaciones que expresa el informe de fiscalización, destaca la destinada al Gobierno para que regule la relación entre el CAPN con fundaciones atípicas, reales patronatos y el Valle de los Caídos. Y mientras esto suceda, se solicita que se presenten cuentas específicas de cada una de esas fundaciones.

Preguntado por esta materia, Álvarez de Miranda ha aclarado que su institución "no pretende poner en duda o en situación de riesgo" la existencia de estos reales patronatos, sino que "exige la existencia de cuentas individuales que permitan valorar esta gestión".

En este sentido, y ante la crítica de algunos miembros de la oposición que denunciaron la financiación, a través de los bienes de Patrimonio Nacional, de actos religiosos, el presidente del Tribunal de Cuentas ha apuntado que el informe verifica que, la existencia de estos reales patronatos "no implica la financiación de actividades religiosas, sino las vinculadas a funciones de carácter social, histórica y cultural".