Mientras tanto, visitan el Palacio donde vive el presidente filipino Rodrigo Duterte. Las 86 candidatas se reúnen con él y con su mujer, "es una oportunidad representar a vuestros países", les decía el presidente de Filipinas. Pero entre foto y foto y saludo, las bellas representantes también se dedican a empaquetar comida, una manera de ayudar a las familias más pobres.