Diego 'el Cigala', "muy triste" por la muerte de Bebo Valdés

"El gran recuerdo que tengo de Bebo es haberlo conocido, es lo más bonito que me ha pasado en el mundo de la música", ha subrayado en declaraciones a Europa Press todavía muy afectado por la noticia. "Lo he sentido mucho, estoy muy triste en este momento. Aunque como me decía él: 'no quiero lloreras', quería que se le recordara por su música".

Diego 'el Cigala' ha querido expresar su agradecimiento al pianista, con el que firmó conjuntamente el exitoso disco 'Lágrimas Negras' (2003), ganador de un premio Grammy y cuyas ventas lograron el triple disco de platino en España.

"Hubo un antes y un después en mi vida, musicalmente y personalmente", admite el cantaor, recordando que aquel álbum también ayudó a "rescatar a este genio que tanta alegría ha dado al mundo de la música", ya que Bebo Valdés, según el testimonio de 'el Cigala', "se tiró muchos años en Estocolmo tocando en un hotel fuera de los ámbitos internacionales, y vino a sacarlo Fernando Trueba con Paquito D'Rivera".

Una pareja formada por Trueba

Precisamente fue el director de cine español Fernando Trueba el responsable de la unión artística del pianista cubano y el artista madrileño. "Nos conocimos por medio de Trueba con la película 'Calle 54' cuando todavía no estaba editada y fui uno de los primeros en verla", ha explicado.

"Ahí tuvimos el primer encontronazo", ha rememorado 'el Cigala'. "Luego vino a Madrid y le invitamos a tocar en el disco 'Corren tiempos de alegría'. A partir de ahí surgió lo de 'Lágrimas Negras' y nos llevó a toda esa maravilla que viví con él. Yo conocí la música cubana gracias a Bebo Valdés, y todo se lo debo a Bebo Valdés", ha enfatizado el cantaor flamenco.

Diego 'el Cigala' también ha destacado la prolífica trayectoria de un músico que trabajó con artistas como Benny Moré o Nat King Cole y fue "director en el 58 de Tropicana en Cuba". "Ha tenido también una vida muy bonita, y llegar a sus años es todo un prodigio", ha reseñado.

El madrileño ha confesado que se queda con el recuerdo de "su música, su persona, esa caballerosidad que sólo tenía él y su elegancia". "Lo ha recogido Dios para que toque el piano para él", ha sentenciado 'el Cigala'.