Artistas, académicos e intelectuales se despiden de Francisco Nieva, "hombre total del teatro"

Artistas, académicos, intelectuales y representantes de distintas instituciones políticas y culturales se han acercado este viernes 11 de noviembre hasta el Teatro María Guerrero para despedir al dramaturgo Francisco Nieva, quien ha fallecido a los 91 años, y a quien el presidente de la RAE, Darío Villanueva, ha definido como "un hombre de teatro en el sentido más total del término"

"Ha significado mucho más que la condición de dramaturgo. Fue un hombre de teatro en el sentido más total del término. Fue director de escena, adaptador de obras clásicas españolas y extranjeras,adaptador de piezas teatrales a la opera, figurinista, escenógrafo y autor teatral", ha subrayado.

Villanueva ha calificado a Nieva como un "hombre irrepetible" por su capacidad de aunar la tradición y el arraigo con su tierra, La Mancha, con las vanguardias europeas con las que convivió durante su estancia en París. Además, ha recordado la "auténtica fiesta" que vivió con el último estreno de una de sus obras, 'Salvator Rosa o el artista', a sus cerca de 90 años y "con la ilusión de un principiante".

En este sentido, el director del Centro Dramático Nacional, Ernesto Caballero, ha elevado la categoría del dramaturgo fallecido a la esfera de las "figuras fundamentales" del teatro, más allá de la literatura española.

"Fue un mago de la palabra y un mago del teatro a través de la palabra --ha asegurado--. Cuando llegó a España provocó una conmoción porque nunca hasta entonces habíamos entendido el teatro como una celebración donde la palabra se hacía escenografía, gesto, cuerpo de actor y finalmente fiesta. Fue un hombre de una elocuencia que ha seguido irrigando el teatro hasta nuestros días".

A su vez, la directora del INAEM, Montserrat Iglesias, ha recordado a Nieva como un hombre generoso y le ha calificado como "una de las figuras fundamentales del teatro", con huella en "todo el mundo teatral" y cuyo legado "va a permanecer".

"Es un día triste pero también de celebración, porque es la coronación de una larga vida muy intensa y dedicada enteramente a la cultura y al teatro. Su inteligencia y su emoción le han acompañado hasta el último día".

Por su parte, el presidente de la SGAE, José Miguel Fernández Sastrón, ha subrayado el carácter insustituible del dramaturgo, a quién ha recordado también por su vinculación con su entidad como consejero y como "artista total".

El actor y diputado de Ciudadanos en el Congreso, Toni Cantó, ha reconocido sentirse "impactado" por la marcha del dramaturgo, a quien ha recordado como "uno de los grandes", capaz de realizar un "teatro carnal". Además, le ha recordado por pertenecer a "una generación que o bien tuvo que vivir el exilio o bien tuvo que lidiar con las dificultades que impuso el Franquismo a la gente de la cultura y del arte", pese a que "luego fue reconocido, afortunadamente".

"Me quedo con el Paco vital de raíces, de tierra, con el Paco manchego pero sobre todo con el Paco que tenía un grandísimo sentido del humor que todos recordaremos. Es una persona a la que le debemos mucho y se nos ha ido", ha manifestado.

A la capilla ardiente, que permanecerá abierta hasta las 18.00 horas, ha acudido también la directora de teatro Elena Pimenta, en representación de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, para "despedir con todo el cariño" a un hombre y un artista al que el teatro "todavía tiene que asimilar. "Él solo dirigió un espectáculo en la compañía y fue un enorme éxito, pero era muy aficionado a las versiones de teatro clásico y fue capaz de unir la vanguardia con la tradición de Cervantes y los autores clásicos", ha señalado.

Por el Teatro María Guerrero han pasado también amigos y familiares del dramaturgo para despedirse de él ante el féretro instalado sobre el escenario, donde han depositado varias coronas de flores, entre ellas las del Ayuntamiento de Valdepeñas y la diputación de Ciudad Real, de donde procede. El cuerpo del artista será trasladado tras el cierre de la capilla ardiente hasta el Tanatorio de La Paz, en Madrid, para ser incinerado.